Las Checas de Madrid...

Una familia al completo asesinada en Madrid por las bombas fascistas.

 Artículo de Europa Press

El Instituto de Estudios Históricos de la Universidad CEU San Pablo ha hecho entrega a la presidenta del comisionado de la Memoria Histórica del Ayuntamiento de Madrid, Francisca Sauquillo, de un trabajo sobre la represión del Frente Popular en Madrid, según informa la entidad educativa.

En concreto, se trata de cinco volúmenes -con una extensión aproximada de dos mil páginas que recogen la investigación 'Checas de Madrid', financiada por el Ministerio de la Presidencia del gobierno de Rodríguez Zapatero, dentro de las ayudas concedidas a la Memoria Histórica. Según informa la institución, las checas, uno de los elementos de la represión republicana en el Madrid de la guerra civil, eran cárceles privadas establecidas por las diversas organizaciones integradas en el Frente Popular, donde se detenía, interrogaba y asesinaba alas personas que consideraban desafectas. El término procede de Cheká, nombre de la política soviética creada en Rusia en 1917.

En este sentido, señalan que, aunque inicialmente surgieron de forma espontánea, a principios de agosto de 1936, tras la creación del Comité Provincial de Investigación Pública, las checas pasan a trabajar en estrecho contacto con la Dirección General de Seguridad, desde donde se les hizo entrega de listas de sospechosos.

 La entrega de este material al comisionado se ha hecho con el propósito de ayudarle en su designio de realizar un plan integral de memoria histórica que identifique los restos de la guerra civil en la capital de España, y en consonancia con lo establecido en el preámbulo de la Ley de la Memoria Histórica, que señala que "la democracia española y las generaciones vivas que hoy disfrutan de ella honren y recuperen para siempre a todos los que directamente padecieron las injusticias y agravios producidos, por unos u otros motivos políticos o ideológicos o de creencias religiosas, en aquellos dolorosos períodos de nuestra historia. Desde luego, a quienes perdieron la vida". Artículo completo...

Algunas citas cuando se reducen a la mínima expresión en algunas ocasiones nos pueden llegar a confundir más que informarnos correctamente. El preámbulo de la Ley de la Memoria Histórica es bastante amplio y esta cita reseñada en Europa Press debiera de haber sido menos escueta para no dar una sensación falsa. Nosotros, amablemente la ampliaremos para que el lector no se nos quede a medias:

Es la hora, así, de que la democracia española y las generaciones vivas que hoy disfrutan de ella honren y recuperen para siempre a todos los que directamente padecieron las injusticias y agravios producidos, por unos u otros motivos políticos o ideológicos o de creencias religiosas, en aquellos dolorosos períodos de nuestra historia. Desde luego, a quienes perdieron la vida. Con ellos, a sus familias. También a quienes perdieron su libertad, al padecer prisión, deportación, confiscación de sus bienes, trabajos forzosos o internamientos en campos de concentración dentro o fuera de nuestras fronteras. También, en fin, a quienes perdieron la patria al ser empujados a un largo, desgarrador y, en tantos casos, irreversible exilio. Y, por último, a quienes en distintos momentos lucharon por la defensa de los valores democráticos, como los integrantes del Cuerpo de Carabineros, los brigadistas internacionales, los combatientes guerrilleros, cuya rehabilitación fue unánimemente solicitada por el Pleno del Congreso de los Diputados de 16 de mayo de 2001, o los miembros de la Unión Militar Democrática, que se autodisolvió con la celebración de las primeras elecciones democráticas.

Mucho trabajo tiene por delante la socialista Sauquillo. Además de recuperar el infausto recuerdo de aquellos lugares de detención, que erroneamente llamaron chekas -en la zona fascista también las padecieron los republicanos- también deben de honrar a los Carabineros, brigadistas internacionales, deportados, represaliados económicamente, guerrilleros, luchadores por la democracia, la UME, los presos, los trabajadores forzados y los que sufrieron los campos de concentración. Cuando hurgamos un poco comprobamos la falsedad de la frase: "la guerra la perdimos todos".

Muchas ciudades sufrieron las bombas de las dos aviaciones. Quienes se llevaron la Ppalma fueron las grandes ciudades republicanas (Madrid, Barcelona, Valencia), mención aparte merece la terrible escabechina que se produjo en la carretera Málaga/Almería. Sin que nos pueda servir de excusa, la terrible represión que se produjo en Madrid, según recoge el estudio del CEU: "El 93% de los asesinados en las checas lo fueron antes de que acabase el año 1936"; es decir, casi toda la represión se produjo antes de que el Gobierno de la República retomase el control de los resortes coercitivos y acabara con la saña asesina de tanto desalmado. La represión en la zona de la II República se produce en aquel verano caliente: no desaparece del todo, lamentablemente, pero es prácticamente residual hasta el final de la Guerra Civil. En contraste, los fieles a la II República no tuvieron paz relativa -en lo que se refiere a asesinatos- hasta entrado los años 50.

Me refiero a los bombardeos fascitas, porque uno de los motivos de las sacas de presos eran como venganza por las víctimas producidas por la aviación franquista. La represión en Madrid, una ciudad infestada por la V Columna pudo aun haber sido peor.