Páginas

lunes, 16 de marzo de 2020

Barragán-Lancharro se equivoca, la cruz de los caídos de Cáceres sí es un emblema franquista



Este domingo pasado, el diario Hoy nos amenizaba el fin de semana con un artículo sobre la cruz franquista ubicada en una importante arteria cacereña, en la Plaza de América. Nada más entrar en Cáceres te topas con esa inmensa cruz que el franquismo erigió como monumento a solo sus caídos y como símbolo de su "cruzada". El Gobierno de la nación, tras una demanda de Compromís, ha instado al Ayuntamiento de Cáceres a retirarla porque «contribuye a perpetuar el recuerdo del odio y el enfrentamiento entre españoles en contra del modelo constitucional de convivencia».
Para saber si la cruz es franquista o no, el redactor del artículo consultó a dos historiadores; uno de ellos es Antonio Manuel Barragán-Lancharro, quien fuera cuarto candidato por Vox para el Ayuntamiento de Badajoz:



Este candidato de Vox es licenciado en historia, pero por muchos estudios sobre historia que tenga, su opinión, al aparecer en unas listas de un partido político de extrema-derecha, era predecible. En su día ya quiso evitar la retirada de un escudo franquista también en Cáceres. Tampoco podemos olvidar que Vox se niega a condenar al franquismo:





La retirada del escudo franquista se resolvió en los juzgados y tuvo que ser retirado. 

Según Barragan-Lancharro la Cruz franquista de Cáceres:
«Es cierto que fue un símbolo franquista –explica–, pero en 1984 fue reseteada. Fue un gobierno democrático el que quitó las inscripciones franquistas; por lo tanto, desde un punto de vista jurista, no es un vestigio franquista. Lo que es, es un monumento democrático, ya que la decisión del cambio se adoptó tras un pleno municipal en plena Democracia».

Un símbolo por mucho que se le quiera "resetear" siempre guardará su significado original. Auschwitz por muchos cambios que recibiera seguiría teniendo el mismo significado. Lo mismo pasa con estas endemoniadas cruces, que de símbolos religiosos tienen muy poco.

El historiador Cesar Rina, experto en simbología franquista lo tienen muy claro. En 2019 fue entrevistado en el diario El Periódico de Extremadura. Una opinión, que como es normal difiere al 100% con la de Barragán-Lancharro:



«Entre la cara de Franco y la Cruz de los Caídos no hay diferencia»


César Rina (Cáceres, 1986) lleva toda su vida académica estudiando la simbología franquista. El cacereño es licenciado en Historia por la Universidad de Extremadura y Doctor internacional en Historia Contemporánea en la Universidad de Navarra y ahora profesor de la Universidad de Extremadura. Ha escrito el libro La construcción de la memoria franquistas en Cáceres. Héroes, espacio y tiempo para un nuevo estado, 1936-1942 y fue uno de los cuatro expertos elegidos para la comisión encargada de catalogar los vestigios franquistas en Cáceres.



Sobre esa lista elaborada por la comisión a la que él pertenece se comprometió la anterior corporación municipal a aplicar la Ley de Memoria Histórica pero el avance ha sido nulo. En este último año ha sido la Asociación Memorial en el Cementerio de Cáceres (Amececa) la que ha insistido a los candidatos al ayuntamiento, ahora con gobierno del PSOE, y esta última semana se ha dirigido a la Junta de Extremadura para pedir que se inicien trámites y se retiren símbolos del Franquismo, entre ellos la «controvertida» Cruz de los Caídos. En este caso, el área de Patrimonio no se pronuncia y la Consejería de Cultura asegura que no dará ningún paso hasta consensuarlo con el consistorio. Y mientras, la polémica también se traslada a la calle, entre los que apuestan por quitarla y los que abogan por mantenerla porque trasciende a la época en la que se construyó.

Cáceres debe retirar la Cruz de los Caídos
Para el historiador no cabe duda de que la cruz debe formar parte del catálogo de vestigios. «Es incuestionable que fue la cruz fue el gran símbolo del alzamiento, no es un símbolo de reconciliación sino todo lo contrario», defiende. En ese sentido sostiene que en la comisión hubo «unanimidad» a la hora de incluir el monolito en la lista. «Nosotros no somos jueces, somos historiadores, nos nombró el ayuntamiento, yo no pertenezco a ningún partido». Deja claro también que su función en la comisión «no fue proponer cambios ni plantear alternativas sino señalar aquellos elementos franquistas». La fórmula de trabajo se ha basado en reuniones periódicas y como base tomaron su libro y actas y textos de diarios locales. «Cogimos el callejero y nos pusimos a buscar». Apunta, en ese sentido, que en algunos casos resultó difícil determinar qué elementos debían incluirse «porque la historia no es lineal». Uno de los casos que menciona es la avenida general Primo de Rivera. «Es cierto que fue prefranquista pero la calle se la ponen en los años 40, es un homenaje franquista».

La que no admite discusión es la Cruz de los Caídos. «En términos historiográficos no hay duda de que es un vestigio». «Fue un signo creado para exaltar el régimen, no tiene nada que ver con la religión, es el gran símbolo de la victoria y de la idea de cruzada, entre una cara de Franco y una cruz de los caídos no hay diferencia». Precisamente, fue por ese motivo que durante el Franquismo estos monolitos se repartieron por toda la geografía y en la Transición fueron desapareciendo. «En el 77 se fueron retirando porque eran símbolos del régimen, en España quedarán un 2% o 3%, de hecho los nostálgicos la han seguido percibiendo como un símbolo para recordar a Franco». Cabe recordar que hace unas semanas y con motivo de la exhumación del dictador el monumento amaneció con un ramo de flores.

Con respecto a los que defienden la continuidad del monolito en la ciudad y aluden a que su presencia trasciende a lo que representaba en un primer momento, Rina expone que «defender un símbolo franquista en nombre de la tradición es un error». «Me cuesta creer que para muchas personas sea un símbolo identitario de la ciudad, el santuario de la Montaña es un símbolo, la plaza Mayor es otro, pero en este caso más que una defensa del imaginario público prima el interés por normalizar el pasado».

Desde su punto de vista, la única polémica que plantea el historiador sobre el futuro de la cruz si finalmente se retira es «¿qué hacer con ella?». En ese sentido, sostiene que la propuesta que se plantea de trasladarla al cementerio «sería peor» porque le daría un lugar solemne. En cualquier caso, concluye que «no es una obra de arte ni tiene valor patrimonial, es un modelo copiado ciudad por ciudad».

4 comentarios:

  1. La colina de las cruces: el lugar que humilló una y otra vez a la URSS y al KGB https://www.religionenlibertad.com/europa/31236/colina-las-cruces-lugar-que-humillo-una-.html vía @relibertad

    ResponderEliminar
  2. No entiendo el concepto de "cruz franquista" ; fue Cristo, no Franco quien fue crucificado.

    ResponderEliminar
  3. La Cruz de Hierro también era un símbolo cristiano utilizado como máxima condecoración en Alemania. Se creó según el modelo de los Caballeros Teutones (una orden medieval de carácter religioso-militar). En la época de Hitler se siguió usando ese distintivo, pero con una novedad, le agregaron la esvástica nazi. Entonces podemos alegar que existen cruces de hierro nazis y aunque le borrásemos esa esvástica, el significado de la condecoración seguiría siendo el mismo.

    https://es.wikipedia.org/wiki/Cruz_de_Hierro#/media/Archivo:Knight's_Cross_of_the_Iron_Cross_with_Oakleaves,_Swords,_and_Diamonds.png

    ResponderEliminar
  4. Lo que os cuesta a la derecha entender las cosas. No se va contra la religión.

    ResponderEliminar

Aviso Legal
Este blog no se hace responsable de las informaciones y estudios que no sean veraces y que aparezcan en estas páginas. Intentamos verificar todo lo publicado para no faltar a la verdad. Esa es la línea que rige este blog, sabemos que nuestro esfuerzo puede no ser eficaz al 100 por 100, por eso en este blog está desabilitada la censura en los comentarios, para que puedan advertirnos de nuestro errores..

Debido a nuestra política de total libertad de expresión, no nos hacemos responsable de las posibles infracciones que puedan cometer nuestros colaboradores y participantes al dejarnos sus opiniones y sus artículos.

Los responsables del Blog Badajoz y la guerra (in) civil podrá estar de acuerdo o no con las opiniones de los colaboradores y de los participantes, debido a esto no se hace responsable de los perjuicios que puedan derivarse de los textos aquí reproducidos y de los comentarios de los usuarios.

Este blog es totalmente privado no dependemos de nadie y jamás no ha movido el ánimo de lucro, por favor se coherente con tus comentarios. Aquí no se ejerce la censura.