En el diario Hoy de Badajoz aparece el siguiente titular
Portillo y la Junta no se entienden y el Festival de Mérida busca director
La desconfianza mutua, con el último capítulo del retrato retirado, y las dificultades económicas, claves .
Los ultracatólicos extremeños, ya están haciendo de las suyas aquí en Extremadura. Han obligado a retirar una fotografía de la exposición Camerinos, que se podía disfrutar en el teatro romano de Merida, con motivo del festival de teatro. En la fotografía podía observarse a Asier Etxeandia cubriendo sus genitales con la estampa de un crucificado.
Víctor Casco diputado de IU, indignado ha declarado que preguntará en la Asamblea a la consejera sobre la libertad creativa de los artistas. Casco cree que el Festival ha cedido al «chantaje de integristas católicos» y que la España de «pandereta y sacristía se ha impuesto».
Ya empieza las desavenencias entre IU y el PP extremeño. Esto no ha hecho nada más que empezar. Al gobierno “marxista” de Monago se le empieza a ver el plumero, y es que el PP es el PP, aquí, en Madrid, o en la Conchinchilla.
El artículo del diario Hoy concluye así:
La exposición Camerinos no ha sido el único sobresalto para la todavía dirección del Festival, que ya intuía que la cohabitación con los nuevos cargos políticos no iba a ser fácil. En el estreno de 'Antígona de Mérida', el 8 de julio, hubo un desencuentro público, en el Peristilo, entre el alcalde, Pedro Acedo, y Blanca Portillo.
El montaje se sustentaba en el inicio de la Guerra Civil, en el hecho real de que decenas de emeritenses se fueron refugiar en los vomitorios del Teatro Romano para huir de los bombardeos de las tropas franquistas y su posterior represalia. La temática y la forma de representación no gustaron ni al alcalde ni a otros dos miembros de su gobierno, el delegado de Cultura, Ángel Pelayo y al portavoz del Gobierno local, Fernando Molina.
Un testigo del encuentro ha relatado a HOY que Acedo comentó a Portillo que «algunas cosas iban a cambiar pronto en el Festival» y que «ya estaba bien de los mismos temas», a lo que Portillo argumentó que había que ver 'Antígona de Mérida' desde la óptica de creación literaria. El choque dialéctico sirvió para verificar una falta de sintonía con la Administración más cercana que luego se agrandó con el nuevo Gobierno de la Junta.
Que algunas cosas iban a cambiar ya lo sabíamos todos, que el PP extremeño se comportará como el PP nacional en lo que se refiere a Memoria Histórica a nadie coge desprevenido. Para el gobierno de Monago ha primado más la opinión de cuatro integristas católicos trasnochados, que la libertad artística. Como dice Víctor Casco de IU ”la España de pandereta y sacristía se ha impuesto.” Los sotanudos y chupahostias (Eva Perón) en la España gobernada por el PP van a hacer su “agosto”.
Señores Cristo Rey sigue entre nosotros con más fuerza que nunca.