Roberto Muñoz Bolaños y Timoteo Mendieta

El historiador Roberto Muñoz Bolaños acaba de escribir un artículo muy documentado sobre el padre de Ascensión Mendieta, que fuera asesinado por los franquistas al acabar la Guerra Civil: Leer artículo...👇

Según la web Foro por la memoria por Guadalajara: "Timoteo Mendieta Alcalá. De profesión carnicero y yesero, natural de Sacedón. Antes de la guerra, las derechas del pueblo le hicieron boicot a causa de sus ideas no dándole trabajo. Al finalizar la guerra fue detenido y tras un simulacro de juicio, asesinado. Su hija Chon ha acudido recientemente a la justicia Argentina a pedir que su cuerpo sea exhumado. Foto cedida por la Familia".

Al leer el artículo de Bolaños la sensación que tenemos es bien distinta. Timoteo Mendieta, a parte de carnicero de profesión, fue otro tipo de "carnicero".

Roberto Muñoz Bolaños (RMB) escribe: "En Sacedón, como en otras localidades, se creó una Comisión Investigadora de la Actuación de los Funcionarios Municipales". Parece ser que esta Comisión realizó una investigación e informaron negativamente sobre ciertos personajes que al parecer eran destacados derechistas. Según afirmaa RMB, el informe desfavorable fue "contra los médicos Gerardo Hernando Trillo y Pedro José Rullán, el veterinario Antonio Lamela Guijarro y el farmacéutico Pedro Bousinit Garay". El día 4 de agosto, siguiendo a RMB, habían sido detenidos los veterinarios Rullán y Lamela, y fueron enviados a la prisión de Guadalajara junto a  Daniel Fuentes. Es decir se les respetó la vida.

La Comisión Investigadora remitió un escrito donde se le reclamaba a las autoridades de Guadalajara “el fusilamiento del recalcitrante fascista Sr. Rullán". Este documento también lo firmó Timoteo Mendieta. No obstante "Las autoridades republicanas hicieron caso omiso a esta petición". Rullán moriría posteriormente el 6 de diciembre de 1936, en venganza por unos bombardeos franquistas, tras una indiscriminada y criminal saca. Hasta ahora a Timoteo no se le puede achacar ningún asesinato.

Escribe RMB: "...entre los 16 y 23 años; fueron asesinadas tras un simulacro de juicio [miembros de FE de las JONS], y sufrieron el ensañamiento de sus verdugos, ya que tras ser tiroteados, y cuando algunos estaban vivos, fueron quemados y posteriormente mutilados...". Este ensañamiento y estos mutilamientos de los que escribe el historiador, aparecen reflejados en numerosas ocasiones en la Causa General. En Almendralejo (Badajoz), la prensa salazarista fue, incluso más allá, a parte de quemar vivos a los presos, en el patio de la cárcel los crucificaron en la pared, e incluso hasta a un preso le clavaron la cabeza contra unos de los muros del patio. Exageraciones de la propaganda profranquista. Había que mostrar el ensañamiento de las hordas rojas para justificar sus propias atrocidades.

Uno de los primeros crímenes al que le acusan a Timoteo Mendieta es el de Julio de Castro era “colgado de un árbol en el sitio denominado ‘La primavera del Tajo’.

el 15 de octubre fueron fusiladas una veintena de personas, según RMB estos fusilamientos se sucedieron tras "tras un simulacro de juicio por un tribunal presidido por el alcalde". Y otra vez parecen ensañamientos: “fueron apaleados en la prisión momentos antes de ser ejecutados hasta el extremo de que al primero le dejaron exánime”.
Dice RMB "que se intentó encubrir los hechos, encargándose de esta labor Timoteo Mendieta Alcalá, quien habló con un vecino de la localidad, Ángel Viñas, para que enterrase a los muertos". ¿Enterrar a los muertos es encubrir lo hechos? No podía faltar que a Timoteo Mendieta también se le acusase de incendiar las propiedades de la Iglesia.

Prosigue RMB:

Timoteo Mendieta Alcalá fue detenido el 9 de abril y juzgado en un consejo de guerra sumarísimo de urgencia el 26 de agosto de 1939, por un tribunal militar presidido por el coronel de Infantería retirado Juan Perelló Sacristán. El informe del instructor, capitán de Infantería Pedro Gutiérrez Corcuera, además de recoger su militancia izquierdista, su pertenencia a la UGT y al comité de partidos del FP, insistía en su papel en el asesinato de veinticuatro personas el 15 de octubre de 1936 y de Julio de Castro, y en su participación en la destrucción de objetos sagrados.

¡Hay amigo¡ Esto no es un juicio farsa sino "un consejo de guerra sumarísimo de urgencia". Como no pude entender esta parcialidad, en Facebook pregunté:

A ver que me entere, ¿Mendieta fue culpable de los asesinatos o no? Bolaños habla de juicios farsa de los comités "revolucionarios" y no usa ningún adjetivo para denominar la "justicia" franquista.

Tuve Suerte por que el propio Muñoz Bolaños fue el que me contestó:

Consejo de guerra sumarísimo de urgencia. Ese es el término legal y en el se sintetiza ese tipo de justicia.

 Yo le contesté que sería legal en la retaguardia franquista. Lo que es cierto es que la justicia franquista fue una gran teatro, que por no contar no contaba ni con la legalidad pertinente ya que la impartían un grupo de militares que se habían colocado flagrantemente fuera de la legalidad. 

Timoteo Mendieta fue condenado a muerte y remacha RMB que "aunque en la sentencia no recogió su participación en el asesinato de Julio de Castro". ¿No sería porque no participó en dicho asesinato?

Acabando que es gerundio:

Han pasado ochenta años desde que finalizó la Guerra Civil. Timoteo Mendieta Alcalá descansa en paz y con dignidad en una tumba que lleva su nombre en el cementerio de la Almudena (Madrid), en la que pronto le acompañará su hija Asunción. Pero, a la vez, las piedras de la fachada de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción siguen recordando el nombre de los vecinos de Sacedón que fueron asesinados entre 1936 y 1939 por orden del comité del que formó parte.

El artículo de RMB se titula "La otra memoria histórica: Timoteo Mendieta y la represión republicana en Sacedón". La "otra" memoria histórica, es un concepto diseñado por Bullón de Mendoza, Luis E. Togores y sus compañeros del CEU. 

RMB se hace eco de tan falsa definición. ¿Qué es la memoria histórica? En el diccionario del español jurídico de la RAE dicen que es el "Reconocimiento de situaciones jurídicas o derechos derivados de hechos históricos desconsiderados durante un régimen dictatorial". No puede haber entonces la "otra memoria histórica", puesto que los asesinatos de la furia "roja" siempre fueron reconocidos por el Estado: Buena prueba de ello es la placa de la iglesia que luce la fachada de la parroquia de Nuestra señora de la Asunción de Sacedón. Placa que incumple la ley 52/2007 y que debería de ser retirada. El homenaje a los asesinados de Sacedón habría que trasladarlo al cementerio de la localidad.

Fosa donde apareció Timoteo Mendieta

Los restos de los asesinados en la retaguardia republicana fueron enterrados dignamente y sus nombres fueron anotados como las víctimas que fueron, no ocurrió lo mismo con los asesinados por el Régimen franquista. Según eldiario.es:

Como dedujeron los técnicos de la ARMH, Timoteo Mendieta fue arrojado en una fosa y anotado en otra, algo que se ha podido constatar ahora mediante una identificación científica. El cuerpo de Timoteo Mendieta fue enterrado el 16 de noviembre de 1939, un día después de su asesinato, y aunque los libros del cementerio lo ubicaban en la Fosa 2, finalmente ha sido encontrado en la Fosa número 1, exhumada recientemente.

El cadáver de Timoteo Mendieta fue enterrado anónimante y, para colmo, erraron al apuntar la fosa donde lo arrojaron. Los nombres de los represaliados por los "rojos" aparecen todos en la Causa General y los represaliados por el franquismo empiezan a aparecer gracias al esfuerzo de decenas de historiadores. Hasta junio de 2017 Asunción Mendieta no pudo recuperar los restos de su padre asesinado tras un juicio sin ninguna garantía jurídica. La placa de de la iglesia de Sacedón lleva más de 80 años en aquel lugar. No existe la "otra memoria".

La represión republicana en Castilla-La Mancha fue brutal: 7.524 personas. Los rebeldes tampoco se quedaron parados, asesinaron a 10.358 personas. Es obvio que aquellos asesinatos los cometieron miembros de partidos de izquierdas, aún así, traernos a colación la Causa General y los resultados de los juicios franquistas no hace justicia a la verdad. Es gana de enmierdar la memoria de aquellas personas que sufrieron los rigores de la justicia militar y de la farsa de la Causa General. La Causa General producía acusaciones de las que los acusados nunca pudieron defenderse, y los abogados defensores de los "ajusticiados" en los juicios franquistas, eran los mismos que habían secundado el golpe de Estado: adictos al Régimen.

Dice Alejandro Torrús en Público que "La sentencia que llevó al paredón al padre de Ascensión Mendieta todavía es legal y firme". No solo eso, sino que ínclitos historiadores siguen usando los papeles franquistas -cargados de ideología- para embarrar la memoria de las víctimas del franquismo