La columna de los 8.000 no era una columna militarizada, iban escasamente armada con algunos rifles, escopetas de caza y algunas bombas de fabricación casera. Estaba compuesta por milicianos que iban en vanguardia y por niños ancianos mujeres embarazadas etc. Los pocos enseres de que disponían los llevaban en carretas y en bestias de carga. Si de una columna militarizada se tratara, lo más normal es que hubieran salido sin ningún tipo de "carga" que ralentizara su marcha. Demostrado había quedado que a los rebeldes la vida de niños de mujeres o de ancianos les importaba muy poco si se trataban de "rojos". Hace muy poco se ha exhumado una fosa común en Guillena las 17 Rosas. Su único delito ser mujeres o familiares de campesinos afiliados a la CNT. Quisieron sacarle información sobre el paradero de sus familiares y, no abrieron la boca ni para tragar saliva. Un tiro en la nuca fue el premio que recibieron.
Como he dicho antes no he encontrado a nadie que justifique este asesinato en masa. El motivo debe de ser es que esta horrible masacre contó con un testigo de excepción que dejó escrito y fotografiado todo lo pudo ver. Norman Bethune se enrola como voluntario para ayudar a los republicanos en la Guerra Civil española. Llega a España el 3 de noviembre de 1936 para coordinar y organizar la ayuda médica que desde Canadá se envía al Gobierno de la República. Bethune se incorporó a los servicios médicos de las Brigadas Internacionales. Con su ambulancia prestó una inestimable ayuda a salvar vidas en la huida que la población civil protagonizó a través de la llamada Carretera de la Muerte. En un libro dejó escrito:
“Lo que quiero contaros es lo que yo mismo vi en esta
marcha forzada, la más grande, la más horrible evacuación de una
ciudad que hayan visto nuestros tiempos. Habíamos llegado a
Almería el miércoles 10, a las cinco de la mañana. Traíamos de
Barcelona un camión con sangre preparada para transfusiones
con destino a los heridos de Málaga. En Almería supimos la noticia
de la caída de Málaga y nos aconsejaron que siguiésemos nuestro
camino, porque se tenía por seguro que Motril había caído
también. Entonces resolvimos ir a ver en qué condiciones se
estaba llevando a cabo la evacuación de heridos Salimos por el
camino de Málaga, a eso de las seis de la tarde, y a unos cuantos
kilómetros nos encontramos con los que encabezaban la
desventurada procesión.
Venían primero los más fuertes, los que habrían podido
transportar sus cosas en burros, mulas y caballos. Luego, el
espectáculo se hacía más lastimoso. Miles de niños (contamos
cinco mil menores de diez años), y por lo menos mil de entre ellos
descalzos y cubiertos apenas con harapos. Las madres los
llevaban echados al hombro o tiraban de ellos por la mano. Pasó
un hombre con sus dos pequeños a la espalda, niños de uno y dos
años, y cargando además con cacerolas y trastos, y recuerdos
queridos de su hogar… Había mujeres que no podían dar un paso
más: la sangre de las úlceras de sus piernas hinchadas teñían de
rojo sus alpargatas blancas. Muchos viejos abandonaban toda
esperanza y, tumbados en la cuneta del camino, esperaban la
muerte.
Nuestro coche se abría paso a duras penas… Los refugiados
pasaban al lado del camión, como si no lo vieran. Seguían
caminando cansinamente, con los ojos entornados hacia el suelo
como síntoma inconsciente de extenuación… Las mujeres
avanzaban lentas con sus vestidos oscuros… Tenían la cara y los
ojos congestionados por el polvo y el sol de cuatro días, y
levantaban hacia nosotros, en sus brazos cansados, los
cuerpecitos de sus hijos… Los niños llevaban solamente su
pantalón y las niñas su vestido ancho, medio desnudos todos bajo
el sol… Niños con los bracitos y las piernas enredados en trapos
ensangrentados: niños sin zapatos, con los pies hinchados; niños
que lloraban desesperados de dolor, de hambre, de cansancio…
cuatro días perseguidos por los aviones de los bárbaros fascistas
Pero no solo contamos con el testimonio del sanitario canadiense. Protagonistas de la huida han relatado aquella traumática experiencia y han dejado para la posteridad sus crudos relatos. Aquí no hay ni testimonios de periodistas portugueses, ni franceses, ni ingleses, ni estudiantes australianos enrevesándolo todo. ¡Chacho, qué mentirosos!
Aquí sin embargo pretenden poner todo baca abajo.
ResponderEliminarFíjaos como argumenta el señor de derechas orgulloso de serlo, el episodio de la columna de los 8000 y en cuanto a que utilizaron como escudos humanos a los suyos.
"Se niegan a creer que la columna de los 8000 mil estaba formada por centenares de milicianos que utili-
zaron a mucha gente como escudos hu
manos al objeto de ser atacados con
la peregrina jusificación que quien
utiliza escudos humanos lo hace con
gente del enemigo, no con los suyos
propios. Eso tendría validez con
cualquier otro grupo, pero no con los comunistas(para los que la vida
de su propia gente no vale nada) y mucho menos con las milicias marxis
tas, ya que no luchaban y por lo tanto pocos escudos humanos hubieran podido coger porque se de-
dicaban al crimen en masa, dejando un terrible rastro a su paso"...
Ole ahí sus cojones. Que argumento más sólido y más riguroso. Estas son las pruebas de que dispone.
No dice columna, sino calumnia.
Y después dicen que queremos rescribir la historia. Querrán que sigan vigentes los estudios de Arrarás, Comin Colomer, Larrazábal o el mismísimo De la Cierva
ResponderEliminarDe la Cierva tiene en comparación con estos mequetrefes, mucha más dignidad.
ResponderEliminarHola DE frente,Juan Antonio, del crimen organizado sobre la columna de los ocho mil, porque eso fue, un crimen ,masacre organizada, con emboscada pertrechada con alevosia, y antelación, y metralletas colocadas en lugares estrátegicos...poco más que añadir, desde luego los de siempre y desde la orilla de siempre embarran la verdad,desvirtuan la realidad para limpiar sus conciencias en el caso de que las tuvieran...
ResponderEliminarDel episodio de la otra masacre, crimen y cualquier epíteto salvaje es perfectamente válido para describir tan noble acción del bando heróico nacional,hay numerosos testimonios de como ocurrió,en internet hay mucha información al respecto también, así que me dá que los de siempre tienen bastante complicado desvirtuar este episodio, pero conociendo su máquina propagándistica seguro que nos cuentan otra película para convencernos...
Y luego aún quedan privilegiadas mentes que protegen a estos bárbaros....porque no tienen otro nombre...
Gracias amigos, pasar buen día, besos soleados..
Estimado amigo:
ResponderEliminarEn Badajoz, en el año 2006, la ARMHEX (Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura) en colaboración con la Biblioteca de Extremadura, y el Centro Andaluz de Fotografía, ´organizó la exposición de fotografías de Norman Bethune y se proyectó el día de la inauguración el documental HEART OF SPAIN de 1937, sobre la actuación de Norman Bethune en España.
Norman Bethune se había dirigido desde Valencia a Almería con el fin de alcanzar el frente de Málaga y socorrer a los heridos, con sus ambulancias y equipos móviles de transfusión. Pero pudo llegar. Se topa en la carretera con la multitud de fugitivos. Cuando comprueba la dimensión de la tragedia, decide desmontar los utensilios médicos de la ambulancia y utilizar el vehículo para llevar hasta Almería a los más necesitados, especialmente niños. Durante tres días sin descanso él y sus ayudantes Hazen Sise y Thomas Worsley (conductor), hacen repetidas incursiones en la carretera para transportar a niños y ancianos. Los horrores de estos hechos (la muerte, el hambre, el cansancio, el miedo, la angustia y la desesperación de los malagueños) quedaron reflejados en el inquietante relato (El crimen de la carretera Málaga-Almería) que escribió el Dr. Bethune y en las tremendas veintiséis fotografías de su colaborador Hazen Sise, que son las que se expusieron en Badajoz en 2006.
PD: EL CARTEL QUE SE EDITÓ SOBRE LA EXPOSICIÓN EN BADAJOZ, ESTABA EN LOS PASILLOS DE LA BIEX EN LA PRIMER PLANTA HASTA HACE POCO, COMO LA MAYORÍA DE LOS CARTELES DE LAS EXPOSICIONES QUE SE HAN HECHO EN LA BIEX, PERO AL PARECER HA SIDO RETIRADO POR ORDEN DEL ACTUAL DIRECTOR DE LA BIEX.
El PP nos quiere esconder lo crímenes de guerra franquistas.
ResponderEliminarGracias por la información