TORRES-DULCE ¿COMISARIO POLÍTICO?
Por: Fernando Garea
Esta versión del llamado caso Faisán procede directamente de un alto responsable de la Fiscalía General del Estado contada en 2011 y servía para explicar que desde todos los puntos de vista, en su opinión, es imposible acusar de colaboración con ETA a quien combate a ETA.
Podría haber un delito de revelación de secretos, imprudencia o mala praxis policial, pero es imposible el delito de colaboración con ETA, aseguraba. Decía que es un contrasentido insostenible. También porque la doctrina exige para que haya colaboración una cierta continuidad e identificación con objetivos y no un hecho esporádico que pueda favorecer a la organización terrorista.Es decir, lo que sostienen los fiscales de la Audiencia que conocen el caso desde el inicio y que deben cumplir ahora la orden "política" de Eduardo Torres-Dulce.
Tampoco se ha condenado a los receptores del chivatazo como miembros de ETA y, por tanto, eso dificulta también que se considere colaboradores a los policías.
Hoy recuerdo esta versión cuando Eduardo Torres-Dulce, actual fiscal general del Estado, ha obligado al fiscal del caso a acusar a dos policías de colaboración con ETA. Y el fiscal lo ha hecho constar de forma insólita en su escrito. No hay muchos precedentes y se abre un conflicto entre Torres-Dulce y el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, que no es precisamente un "rojo peligroso". Tampoco había muchos precedentes de la Fiscalía recurriendo una imputación (caso Urdangarín).
Y recuerdo también las veces que Torres-Dulce ha dicho en los últimos meses que defiende la autonomía de los fiscales y su respaldo a que los fiscales instruyan los sumarios. Por eso, permite sospechar si detrás de algunas decisiones de la Fiscalía en el caso Gürtel no habrá estado directamente Torres-Dulce.
Esta es la versión publicada en julio de 2011 en este blog, sin cambiar ni una coma: "La policía vigilaba desde hace cinco años el local que la organización terrorista utilizaba para cobrar su extorsión. Todo el que entraba y salía era controlado y grabado y se llevaba puesto en el coche una “chicharra” o localizador. Durante años la policía obtuvo de esa vigilancia información valiosa de la banda terrorista y sobre su funcionamiento. Pero alguien relacionado con el local se percató un día de las cámaras instaladas y quiso denunciarlo. Un policía se puso en contacto con él y logró convencerle de que permitiera mantener la vigilancia. La vigilancia policial estaba judicializada, es decir, controlada por un juez de la Audiencia Nacional. Ese magistrado se ausentó de forma temporal y un compañero asumió sus casos para, como suele ser habitual, tramitar los asuntos urgentes a la espera de la vuelta del titular del juzgado. Sin embargo, el sustituto no resistió la tentación y decidió dirigir una operación policial para desmantelar la trama de extorsión de la banda terrorista.
Los policías intentaron convencerle para que no lo hiciera, porque seguían obteniendo información valiosa. El magistrado siguió adelante y los mandos policíales decidieron avisar al ciudadano que había visto las cámaras y al que habían convencido para que permitiera la vigilancia durante años. Días después fueron detenidos todos los implicados en la trama de extorsión de la organización terrorista. La película podía haber terminado ahí, pero siguió y la Justicia procesó a tres mandos policiales por la llamada que alertó de la operación. No les encausó por revelación de secretos, sino por colaboración con banda armada, como si con su llamada estuvieran ayudando a la actividad terrorista.
El principal partido de la oposición decidió utilizar políticamente ese caso contra el ministro del Interior. El interlocutor de ese ministro y responsable de Justicia del partido de la oposición seguirá en política tras haber visto cómo eran condenados varios de sus subordinados por falsear la identificación de cadáveres tras un accidente aéreo. A pesar de todo, ese partido de la oposición acusó al ministro de responsabilidad política por el procesamiento de sus subordinados.
¿Se puede sostener que el ministro del Interior y los mandos policiales que desmantelan a la banda terrorista colaboran con ella?
Paradojas de la vida. Unos funcionarios policiales que han intervenido en las detenciones de multitud de terroristas de ETA, se ven ahora acusados de colaboración con ellos. ¿Alguien lo entiende?
ResponderEliminarEl PP utilizó miserablemente el asunto del terrorismo para arañar votos y no le importó que el gobierno de Zapatero, estuvidera inmerso en plena negociación o conversaciones con ETA para poner fin a la lacra terrorista. No sólo fue el caso Faisán. También se inventaron que Zapatero había pactado con los terroristas la anexión de Navarra, la autodeterminación,"Zapatero ha aceptado la presión de ETA", "El gobierno está en manos de ETA","Han entregado las llaves del Estado a Batasuna",et,etc... Ningún partido llegó nunca tan lejos como estos del PP. Con un antecedente. Ya lo hicieron con anterioridad cuando utilizaron el caso del GAL para desgastar a Felipe González.
Los ciudadanos entendemos que hay unos pocos asuntos que no deben entrar en la lucha partidista. El terorismo es uno de ellos.
Luego están los voceros del gobierno del PP, como el indigno director de ABC, Bieito Rubido que ha dicho este viernes "Madina simpatiza más con ETA que con el PP". Esto se lo dice este tiparraco a alguien que perdió la pierna en un atentado de los terroristas y fue en la cadena de los curas que todos financiamos.
Ni el presentador, Sáenz de Buruaga le obligó a rectificar, ni los directivos de la cadena le han obligado a que lo haga, al menos que se sepa, ni los propietarios del periódico lo han cesado.
El PSOE ya ha anunciado que habrá querella si no se retracta.
Hay que decir, porque es importante aclararlo, que los terroristas que fueron presuntamente avisados, fueron finalmente detenidos unos dias después de estos hechos.
Si la cadena de los curas, que pagamos todos, se utiliza para hacer este tipo de periodismo, mejor sería que la financiaran ellos.
ResponderEliminarNo veo mal que el Estado financie las distintas actividades de la Iglesia Católica, muchas de ellas en favor de los más necesitados. Ahora bien, pagarles unos medios de comunicación que estén al servicio de determinados intereses políticos es otra cosa.
Siendo así, yo sería partidario que se autofinancien ellos sus sectarios medios de comunicación.
Sí amigo DE FRENTE, este es el mundo de la derecha, según Ramón Cotarelo en España no hay derecha, sino, extrema derecha. Sobre el Gal habría decir que contaba con la bendición del ex ministro franquista el sr. Fraga Iriribarne. Todos querían acabar con ETA, lo que pasa es que el camino elegido no era el adecuado.
ResponderEliminarVivimos en un mundo al revés, Fiscales del Estado saliendo en DEFENSA de una posible imputada, Gobiernos infiltrando cantidades ingentes en bancos quebrados y a la vez dejando que 30.000 familias sean deshauciadas en un solo año, algunos para justificar tamaña injusticia dicen que los deshaucios se tramitaron en la era zapateriana, si es verdad, pero se ejecutaron en el año Mariano, un Mariano que no quiere oír ni hablar de la dación en PAGO.
Dicen que el socialismo no funciona, menos mal, me hacen sentir más tranquilo al saber que vivimos en un sistema que funciona perfectamente.
Desgraciadamente la Iglesia como siempre es de derechas, al menos en lo que se refiere a los jefes. A principio del siglo pasado la masa obrera ya identificaba a la iglesia con la derecha y los poderosos. A principios del XXI seguimos identificando a la iglesia con la derecha, hay cosas que permanecen inanterables. Todo hay que decirlo, siempre ha habido voces discrepantes dentro de la iglesia pero son las menos y siempre son hábilmente ignoradas.
ResponderEliminarMientras todo siga así me seguirán llamando anticlerical. Además no hace falta creer en la iglesia para estar a bien con el altísimo.
DE FRENTE la iglesia como tal es un gran negocio y no necesitarían financiación pública, solo hay que ver lo nada transparente que es. Nos engañan, nos mienten para que todo siga como siempre. Ahora resulta que nuestra "económica" monarquía no es tan barata. aparte del presupuesto el Gobierno le paga a la Corona, los viajes, la seguridad y el mantenimiento de los palacios, sabemos que es así pero no cuanto se gastan.
Ya quisieran ellos que el socialismo desapareciera, pero afortunadamente esto no es así.
ResponderEliminarCon todos sus defectos y con todos sus errores, prefiero al PSOE cien mil veces antes que estos.Encima los muy hipócritas van de patrióticos. ¿Qué tiene de patriótico utilizar el terrorismo para desgastar gobiernos?
Estoy de acuerdo contigo. El GAL no era el camino. Pero el camino tampoco era el que recorrió el PP de José María Aznar en este asunto, utilizar irresponsablemente el GAL para derribar a Felipe González.
Que los jueces hubieran desarrollado su trabajo sin interferencias políticas en forma de debate público, hubiera sido el camino.