Facebook: la jungla de la manipulación

Me tuve que crear un perfil de Facebook nuevo porque del antiguo los piratas informáticos me robaron la contraseña. Me fue imposible recuperarlo y entonces no tuve más remedio que inventarme otro nuevo perfil -el viejo quedó anulado-. Se me pasó por la cabeza abandonar esta red social debido a que se comparte tanta basura que a veces da verdadero asco permanecer por estas latitudes.

En realidad Facebook me permite promocionar este blog que estás leyendo, y además tener contactos con historiadores (Ángel Viñas, Fernando Hernández Sánchez, Ricardo Robledo Hernández y un largo etc), con personas interesantes y/o relevantes de la esfera nacional (Ignacio Sánchez Cuenca, Emilio Silva, Javier Valenzuela, Luis de Guezala), y con amigos de toda la vida, músicos de ayer y de hoy, conocidos, etc, etc. Por algo se llaman Redes Sociales.

Con el perfil antiguo tomé una determinación: con amigos que solía diverger en exceso, para no perder la amistad "analógica", decidí rescindir la amistad "virtual" bloqueándolos. Una gilipollez por mi parte porque bloquear a un amigo puede crear más conflictos que ayudar a resolverlos. Así que con este nuevo perfil decidí no bloquear a nadie. Pensé que con no entrar al trapo el asunto estaba resuelto. 

He de reconocer que me es imposible quedarme callado con las cosas en las que no estoy de acuerdo y sobre todo cuando se manipula, se miente o se dicen, a mi modo de entender, medias verdades.

En esta nueva etapa me han expulsado de dos grupos de Facebook -administrados por dos liberticidas- he perdido horas de interesantes lecturas -sigo estudiando la Guerra Civil- debatiendo por la exhumación de Franco; debatiendo por las gilipolleces que ha legado Antonio García-Trevijano Forte; debatiendo por el insignificante turismo sanitario y más temas que preferimos olvidar.

Lo que más me irrita es la manipulación y la xenofobia racista. Un amigo -que sé que no es racista- compartía el siguiente vídeo:



El vídeo procede del perfil de Facebook de un tal Richard Steinbock, con una leyenda en Alemán que según la traducción que ofrece la propia red social  venía a decir:

De ninguna manera, comparte! Que nadie vea lo que está pasando en Francia........ 😉......

No se explica nada, tan solo insinúa que se está ocultando lo que está sucediendo en Francia. Los comentarios que produjo el vídeo eran de esperar: cientos de "negros" y personas con aspecto marroquí manifestándose y rompiendo todo lo que cae en sus manos provoca racismo instantáneo:

Hoy, uno de los miembros de la comisión ha escrito que en Francia la integración ha funcionado bien. 😂

El vídeo está editado -pertenece a un vídeo mucho más largo-  y no se explica porque estas personas obran tan violentamente. Pero quien subió este vídeo a Facebook lo hizo con propósitos claramente racistas.

Aquí tenemos la información completa:

El suburbio de Seine-Saint-Denis, en París (Francia), es escenario este sábado de enfrentamientos entre policías antidisturbios y manifestantes, que protestan contra la violencia policial a raíz de la violación de un joven negro por parte de varios agentes, que resultó gravemente herido, presuntamente tras haber sido sodomizado con una porra. Leer más...

Y este es el vídeo original. Dura tres horas


Los hechos acaecieron hace casi un año y medio, a mediados de febrero de 2017. Y la pregunta que se hacen algunos es ¿Qué está pasando en Francia?, lo que pasó, en este caso en concreto, es que una manifestación que arrancó pacificamente por una protesta legítima -contra la violencia policial- se tornó violenta. No es la primera vez ni será la última que ocurra esto. En Francia, aquí y en Pernanbuco:

La capital económica de Carolina de Norte, uno de los grandes centros financieros de EEUU, despertó este jueves con cristales rotos en el asfalto, comercios saqueados y voces que exigen respuestas a la muerte de Keith Scott, un hombre negro de 43 años y padre de siete hijos abatido la víspera por la policía. La segunda noche de protestas en el centro de Charlotte, en las que participaron solo varios cientos de personas, volvió a degenerar en violencia. Casi medio centenar de manifestantes fueron arrestados y uno de ellos recibió un balazo y está gravemente herido. El gobernador ha declarado el estado de emergencia, y ha desplegado a la Guardia Nacional y la fuerza estatal de carreteras. La tensión racial arrecia de nuevo.

Esto ocurría en 2016. y seguramente en un futuro no muy lejano hechos muy parecidos se vuelvan a repetir. El odio racista es un mal que se extiende como en su día lo hizo la peste. Es muy fácil convencer a la gente de que el mal de todos los males, es el extranjero que viene a quitarte el trabajo, el pan y las ayudas sociales. Todo una paradoja, si nos quitan el trabajo no les hace falta ningún tipo subsidio. Pero los negros y los moros no tienen medida, se quedan con nuestros trabajos y a la vez con las ayudas sociales (y muy pronto hasta con nuestras mujeres). Los españoles es que somos muy tontos, es ver a un negro o a un moro y le damos todo lo que pidan: trabajo, casas, pagas gratis...

En otro de esos infructuosos debates, que estos últimos días he estado manteniendo, apareció en escena un señor que compartía un meme de las grandes memeces que ha legado a la posteridad el sr. Antonio García-Trevijano Forte, y que algunos las toman como verdades absolutas. Como la majadería esa de que todos los partidos aceptan la monarquía heredada del franquismo, que no hay libertad política colectiva o que los partidos españoles son estatales (que pertenecen al Estado). Son tonterias en grado superlativo, absurdeces de una mente enferma que en la secta del MCRC tienen gran aceptación.

Este señor, del que ahora vamos a hablar, en su perfil de Facebook compartía una vieja manipulación sobre Rodríguez Zapatatero:

Pedro G. Marti afirmaba que Zapatero estaba reivindicando Andalucía para Marruecos. Y para eso mostraba una fotografía de Zapatero junto a Mohamed VI, posando los dos delante de un mapa de España y el norte de África que venía a confirmar tal aseveración. El problema para el sr Pedro G. Marti es que aquella imagen era una jodida manipulación. En el diario El País encontramos la fotografía original:

El primer acto público de la visita ha consistido en descubrir una placa en memoria de las víctimas del atentado del 16 de mayo de 2003 en Casablanca, que causó 43 muertos, cuatro de ellos españoles. Zapatero ha propuesto a Mohamed VI un plan conjunto contra el terrorismo, un tema caliente entre los dos países tras los atentados del 11-M. El País...

Mis amigos virtuales me sabrán disculpar si dejo de interactuar con ellos, tengo que limitar mis visualizaciones y elegir a quien me interesa seguir y a quien no. Es cuestión de priorizar los intereses comunes con otras personas que concuerdan más con mi forma de pensar. Mi defecto es claro. No me puedo quedar callado y soy muy curioso. Hoy gracias a que un amigo compartía cierto enlace, me he tragado un artículo de José Mª Pagador, periodista que cada vez se nos escora más a la derecha. Y el otro día por la misma razón me comí con patatas fritas una entrada del Blog de Álvarez Buiza, el cual ponía al mismo nivel la exhumación de Franco con las noticias insulsas y amarillistas del verano. También otros día cualquiera de estos, y por los mismos motivos anteriores, me tragué un artículo de Carlos Aurelio Caldito Aunión (exdirigente de Vox y hermano de un músico amigo mío), que comparaba la españa caciquil que denunciaba Joaquín Costa con la España actual. Pues va a ser que no, que por muy mal que estemos, que lo estamos, no son comparaciones posibles, ni España es esa nación cainita que nos quieren pintar. Que hay mucho imbécil y sinvergüenza suelto, solo tenemos que repasar las RRSS, pero también hay mucha buena gente, o gente normal a secas, que vive y deja vivir. Solo que a los integristas de la patria les conviene pintar la situación como si en España estuviésemos al borde de otro conflicto civil.

El termino cainita es otro término muy desafortunado según la opinión muy humilde, como es la del que esto escribe. Caín mató a Abel. La historia -falsa- de la Biblia de un hermano que mata a otro. Mi hermano es de mi propia sangre y mi vecino no deja de ser un extraño. Es falso que todos seamos hijos de Dios, y partiendo de esta falsedad un conflicto entre vecinos jamás puede ser un conflicto cainita. La Guerra Civil no fue una Guerra entre hermanos, como falsamente se nos quiere hacer ver. Si pensamos que la Guerra Civil fue una pelea a muerte entre hermanos aumentamos el drama casi a categoría bíblica.

Si un servidor hubiese participado en la guerra española, el mismo horror le hubiese causado matar a un vecino de San Roque (barriada de Badajoz), a un riojano que a un legionario italiano. Todos para mi eran desconocidos.

Si vamos a la RAE y buscamos cainismo:

Actitud de odio o fuerte animadversión contra allegados o afines.

Usamos entonces el término cainita con una alegría pasmosa, la Guerra Civil no fue una guerra precisamente entre afines, pero aún así, y por muy aceptado que esté el término cainita, un afín o un allegado nunca será mi hermano. Y no olvidemos que Caín y Abel eran hemanos.

Y en esas estamos, he vuelto a caer en el mismo juego que me hacía perder tanto tiempo con la cuenta de Facebook que perdí por causa de los piratas "cainitas". Por eso queridísimos "cainitas", hasta aquí hemos llegado. Se acabaron los debates infructuosos y "cainitas".

 Abur, que tengo prisa.