Según El Salto, los sindicatos de empresarios del campo que han convocado la manifestación en Don Benito ascendían a 10.000 personas, esta cifra la habían obtenido de los propios sindicatos convocantes, según reconocían en dicha web de noticias. En el Hoy rebajaban la cifra a 7.000 personas. En El Mundo escribía David Vigario que habían convocado a 5.000 personas. Un baile de cifras que se me antoja pensar que ni los propios convocantes tenían ni pajolera idea de los manifestantes que habían logrado convocar. Siguiendo al Hoy, la delegación del Gobierno fijaba otra cifra muy distinta, 3.000 personas. Debido a este baile de cifras tan confuso, es meridianamente imposible saber cuanta gente acudió a la cita de los empresarios del campo.
La reivindicación de los ganaderos y agrícolas es justa y muy necesaria, por eso no es de extrañar que cientos de jornaleros secundaran la convocatoria previendo que su puesto de trabajo podría estar en riesgo, pero fueron muy pocos si nos hacemos caso de las cifras más fiables (3.000), que siempre son las que recoge la policía y que ofrece la delegación del Gobierno. En Extremadura trabajan en el campo 54.300 personas (cifras de 2018), 43.000 hombres y 7.300 mujeres.
Viendo las personas que se habían congregado en la Agroexpo, me inclino más a pensar que había cientos de personas, más que esas 10.000 o 7.000 de las que están hablando, aunque es difícil precisar por un simple vídeo cual sería la cifra aproximada. Pero claro está, un servidor no es objetivo, el don de la objetividad solo está al alcance de los biempensantes.
De todas formas, me suscribo a la reivindicación de precios justos que han demandado en la Agroexpo de Don Benito. Mucho me temo que este problema tiene difícil solución, ni Zapatero, ni Rajoy hicieron nada al respecto:
TITULAR DE 2010:
Es algo muy curioso, grandes empresarios "timando" a medianos y pequeños empresarios del campo. Ahora la patata caliente la tiene el narcogobierno bolivariano y bilduetarra de Pedro Sánchez.
La Fiscalía ha abierto diligencias para exigir responsabilidades por los actos violentos:
Las protestas que el miércoles acabaron de forma violenta en las puertas de Feval, en Don Benito, llegan al juzgado. La justicia ha abierto diligencias previas para investigar todo lo ocurrido al final de la manifestación organizada en defensa de unos precios justos para el campo. Los incidentes ocurridos acabaron con 19 heridos leves, 16 de ellos policías antidisturbios que recibieron una lluvia de objetos cuando trataron de impedir la entrada de los manifestantes en el recinto donde se celebra Agroexpo. También hubo tres manifestantes heridos.
La actuación judicial tratará de dilucidar si los hechos violentos fueron consecuencia de grupos organizados y los autores concretos de los destrozos ocasionados. El mismo miércoles ya se detuvo a una persona, un joven de un pueblo de la comarca del Valle del Jerte. Fue puesto en libertad por la tarde. Igualmente, las fuerzas de seguridad identificaron a otros manifestantes. HOYEn mi opinión nada o poco deben de temer estos empresarios del campo, no son ni independentistas ni peligrosos podemitas bolivarianos evitando un desahucio. No los juzgaran por sedición ni nada por el estilo, si acaso alguna reprimenda y alguna leve multa y asunto resuelto, o ni eso. No en balde al finalizar los hechos violentos vimos a algunos de estos agricultores congraciándose con la policía, como ese joven de ASEPREX (Juan Francisco Chamorro, de 36 años y dueño de una explotación agrícola) que llevaba en su espalda una bandera de Extremadura junto a otra de España. Casi se rozan los morros violentamente con la policía, hacía pocos y minutos, e instantes después la situación ya era más amorosa y emotiva. Cuanto candor.
Y es que no hay nada mejor que llevar banderitas de España a las manifestaciones para diferenciarse de la izquierda perroflauta y chavista.
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