Fascistas en Gijón. Para esto sirven los monumentos franquistas que todavía quedan en España

 

Esta es una de esas cruces fascistas que homenajeas a los golpistas de 1936 del bando franquista. Es el monumento a los "Héroes del cuartel de Simancas" de Gijón. En aquel cuartel se refugiaron un grupo de golpistas que se hicieron fuertes durante 33 días. El  21 de agosto de 1936 los golpistas fueron derrotados y las fuerzas leales a la II República tomaron el cuartel. En la literatura filofranquista se cuenta que el cuartel fue asediado por "5.000 milicianos, con artillería y aviación de bombardeo" (ver enlace...👈).

Lo incompresible es que Franco, con este tipo de héroes, que con tan solo con un puñado de hombres pueden hacer frente a 5.000 milicianos, tardara tres años en vencer a la II República, y que encima para entrar en Madrid necesitara que el coronel Casado junto a los anarquistas y la derecha del PSOE (Julián Besteiro), dieran un golpe de Estado traicionando al Gobierno de Juan Negrín López.

También se inventaron la leyenda que Queipo de Llano con tres camiones de Campsa y un puñado de legionarios tomaron Sevilla. Mentira desmontada por Francisco Espinosa tirando de la propia documentación franquista.

Esta supuesta gesta fue utilizada por el franquismo en su mitología. Hasta se construyó una maqueta recordando como quedó de destrozado el cuartel después de que se rindieran los golpistas. Dicha maqueta fue expuesta en el Colegio de la Inmaculada donde ha vista al público por un periodo de casi 80 años. Hasta que en 2019, con el cambio de Gobierno socialista, la maqueta fue trasladada al Museo de la Guerra Civil Española El Cuetu de Colloto...

...  El Ayuntamiento de Gijón, justo en el momento de relevo en el gobierno de Foro por parte del PSOE en mayo de 2019, donó esta gran maqueta junto a otros bienes al Estado, siendo aceptada por el Ministerio de Cultura y Deportes en noviembre de ese mismo año. El Boletín Oficial del Ministerio de Defensa de 31 de julio de 2020 asignó a la colección estable del Museo Histórico Militar de A Coruña los bienes donados por el Ayuntamiento de Gijón y aceptados por Cultura. Leer más...👈

Mandaron la maqueta a un lugar más apropiado como un museo. Porque un colegio de jesuitas no es el destino más idóneo. Tampoco es el lugar más apropiado para que en su fachada siga existiendo la cruz franquista en homenaje a un nutrido grupo de golpistas que se pusieron fuera de la ley en 1936. De no haber triunfado Franco, aquellos golpistas que quedasen vivos del cuartel de Simancas, habrían sido juzgados por rebelión militar, desde luego ninguno de ellos hubiera sido considerado como héroes. Digan lo que digan los franquistas y negacionistas este monumento contraviene la Ley de la Memoria Democrática. 

Si Hitler hubiera ganado la guerra, Goebbels, el propio Führer, Hermann Göring y demás cohorte nazi hubieran sido tratados como héroes en Alemania y Mussolini en Italia. Pero al perder la guerra han pasado a la historia como lo que fueron. En España al ganar el fascismo criminal, todavía se recuerda por parte de un sector de la población a los golpistas del 36 como auténticos héroes. Cuando en realidad no eran más que unos facinerosos.

Recientemente en Bolivia un general ha intentado dar un golpe de Estado para deponer al presidente electo Luis Arce. Hasta el Gobierno de Javier Milei ha condenado la asonada militar. El general Zúñiga ya había amenazado por televisión a Luis Arce. La difícil situación económica fue la excusa para intentar eliminar al presidente boliviano. Siempre los golpistas necesitan dotarse de excusas potentes para engañar a los ciudadanos. En el golpe de 1936 se han usado multitud de excusas, y todas ellas falaces. Como tampoco había excusa alguna para la huelga revolucionaria de 1934. Otro golpe de Estado, pero del lado civil y revolucionario.

Este 28 julio, un grupo de fascistas españoles con el brazo estirado se han reunido en frente del monumento  de "Héroes del cuartel de Simancas", contraviniendo a la Ley de la Memoria Democrática, para recordar a aquellos facinerosos que se pusieron fuera de la ley.

Los viandantes que grabaron aquel ilegal y casposo acto fascista en la España del siglo XXI, no salían de su asombro. ¿Cómo era posible que un grupo de personas estaban cantando en plena vía pública el Cara al sol? Y lo que es más degradante para la democracia española, estaban cantando el himno fascista (adoptado alegremente en la dictadura de Franco y obligado a cantar en las escuelas) delante de un monumento ilegal, que es una auténtica exaltación de la dictadura y de los golpistas de 1936. Digan lo que digan, España sigue oliendo a fascista.