Gaizca Fernández Soldevilla dice que soy un trol mentiroso.

En la entrada anterior denunciaba que en el Grupo de FaceBook Historia Contemporánea me habían bloqueado, tan solo por hacer un comentario legítimo en defensa de Ricardo Robledo Hernández, que fue censurado en dicho grupo. La denuncia la efectué a través de este blog en otro Grupo, Historia 20-21: Contemporánea, del Tiempo Presente, Actual (H-20.21-CTPA)

Parece que se debió de montar cierto revuelo, pues varias horas después ya me habían desbloqueado, aunque seguía sin ser miembro de dicho Grupo. Circunstancia esta que expuse en el Grupo H-20.21-CTPA:

De todo lo que exponía mostraba pantallazos que verificaban que no mentía y que cierto administrador estaba ejerciendo de comisario político, o peor aún, de inquisidor ideológico. Curiosamente Gaizca Fernández Soldevilla, brindaba con una manzanilla a mi salud y me tildaba de trol mentiroso y por supuesto, "hater" (anglicismo que parece ponerle mucho). Todo lo que expuse en la entrada anterior es cierto y creo haberlo demostrado. Quien me conozca sabe que no miento.

Éramos pocos y pario la abuela
En esta historia se apunta al carro el doctor en historia, Javi GC (Javier Gómez Calvo), autor de un penoso libro sobre la represión franquista, que no es otra cosa que una justificación del genocidio franquista. Hace unos años le dediqué una entrada que ahora nos enteramos de que no le gustó nada. El hombre va de graciosillo y dice que "Eh, respete la antigüedad: yo llegué antes a esa pocilga". Es típico entre los "constitucionalistas": todo lo que está fuera de mi entorno y no puedo controlar es una pocilga. Igual que los romanos (los primeros en saludar con la mano alzada), todo el que no era romano era un bárbaro.

Pues nada señor Gaizca Fernández Soldevilla, que le siente bien la manzanilla, pero tenga mucho cuidado con la resaca por la ingesta indebida de tan apreciable caldo; no es excesivamente recomendable.

Suma y sigue.

Y seguimos para bingo.
Otra amistad de Javier García Calvo, Joseba Louzao, preguntaba que versión había yo leído de la tesis doctoral del sr. García Calvo, que no coincidía para nada con lo que había leído el sr. Joseba Louzao. Yo se lo explico:

Me compré el libro en una populosa librería de Badajoz, y como ustedes comprenderan un servidor no se compra libros para no leerlos, cuestan demasiado caros.

Hace cuatro años hice una pequeña crítica a este libro en el blog:

Voy por la página 35 del libro Matar, Purgar, Sanar y el plumero fabricado con las plumas del aguilucho franquista se ve a leguas. Su autor suponemos que no es un franquista redomado, tan solo es de la escuela de Julius Ruiz o Del Rey Reguillo: los historiadores no militantes. En la introducción ya se notaba el tufillo semi-exculpatorio de la represión franquista.

Comentaba que ya en la pág. 35 el tufillo exculpatorio de la represión franquista era más que evidente, aún me faltaba leerme el libro completo. Han pasado cuatro años y el sr. Gómez Calvo sigue siendo uno de esos autores que han publicado sin pena ni gloria, así que no volveremos a comentar nada (en esta pocilga) de este señor doctorado en historia. Debería de sentirse orgulloso de que este "porquero"  se comprase su libro y de que me lo leyera hasta el final: eso sí, con mucha paciencia. pero no se preocupen, estoy acostumbrado a tratar con CERDOS.

Nota:
Hace unos años me las tenía que ver con verdaderos franquistas, auténticos fascistas, incluso hasta tuve que pasar por los juzgados junto a un compañero. Hoy estos fascistas y franquistas o han dejado de dar la barrila en público o directamente han desaparecido o eliminado sus blogs. Hoy son los "eruditos"; los "constitucionalistas"; los "equidistantes" y, por cierto, aprendices baratos de Torquemada, los que parecen querer copar el Olimpo de los dioses y que todos les rindamos la pleitesía más que ganada; pues ellos, solo ellos, tienen el don de la objetividad  y de la verdad absoluta.