Los borregos del régimen del 78 compran la carnaza de "El Español"

Pedro J. Ramírez es un periodística sistémico, que según él está encontra de los extemismos, sin embargo él es un extremista del reino borbónico. Se confabuló para expulsar de la Moncloa a Felipe González, con aquello que se llamó El sindicato del crimen:

Pedro J. Ramírez, Jiménez Losantos, Luis María Ansón... todos, reconocidos periodistas que fundaron en 1994 la Asociación de Escritores y Periodistas Independientes. No obstante, fue bautizado por los socialistas como 'El sindicato del crimen'. Su plan: acabar con el Gobierno de Felipe González. La Sexta...👈

Pedro J. ayudó a fundar El Mundo, uno de esos diarios generalistas que crean estados de opinión con los que después los ciudadanos votan casi a ciegas. Pedro J. desde El Mundo estuvo muchos años abonado a la teoría conspiraroia del 11-M:

Pedro J. Ramírez y Federico Jiménez Losantos son los agitadores principales de una teoría que ya prácticamente no tiene seguidores en España, salvo algún radical de la derecha. Es la ‘teoría de la conspiración’, esa que defiende que los atentados del 11-M no fueron planificados y perpetrados por el terrorismo yihadista, sino que fue una conjunción de etarras, socialistas y policías traidores. El Plural...👈

Pedro J. Ramírez es la prueba palpable de lo que es el conglomerado mediático del sistema del 78. Es una muestra de como el periodismo ha lobotomizado a la ciudadanía, tal y como ha denunciado en muchas ocasiones José Luis Sampedro. La prensa de los borregos tiene secuestrada la democracia. A Pedro J. lo expulsaron de El Mundo y con la indemnización millonaria se montó un panfleto a su imagen y semejanza, El Español.

En un grupo sobre la Guerra Civil que administro, un miembro ha compartido un post sobre Podemos; que, por cierto no tiene nada que ver con la Guerra Civil. Se trata de un artículo sobre los "condenados" de Podemos:

"La foto del fin de Podemos: tres condenados, dos investigados y el caso Dina acechando a Iglesias", este titular nos lleva a un artículo de El Español, que oh que casualidad es de pago, y no podemos leerlo. Tan solo nos muestran un pequeño aperitivo:

Los condenados Juan Carlos Monedero, Isa Serra, Alberto Rodríguez y Jesús Santos arroparon a Pablo Iglesias en su despedida de la política.

"Hemos cometido errores, pero lo que está claro es que a nosotros no nos pueden comprar, y por eso nos persiguen jueces y medios". Es Pablo Iglesias, y no hace falta ponerle fecha a la frase, la ha repetido periódicamente en los últimos siete años, los que ha pasado al frente de Podemos, el partido que fundó y llevó al Gobierno. Ahora se va, lo deja todo. Y en la noche del anuncio se hizo acompañar, junto a él en el estrado, de gran parte de los dirigentes del partido -no todos, pero luego entraremos en eso- y de algunos de los integrantes de su lista para el 4-M -con enfados remarcables entre ellos-...

... Y hasta ahí puedo leer, como diría Maira Gómez Kemp en el mítico programa de televisión Un, dos, tres. Da igual que el artículo no se pueda leer porque si no se tiene usted que rascar el bolsillo y comprarse una suscripción a ese horrendo panfleto, los aborregados lo comparten porque con el titular les basta.

Isa Serra fue condenada a 19 meses  por manifestarse contra un deshaucio. Según el informe policial Isa Serra es responsable de haber proferido insultos, dado empujones y arrojado objetos contra miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado durante la protesta contra un deshaucio. Ella lo negó aduciendo que no se colocó entre las primeras filas de los manifestantes, que no se sentó para impedir el paso, que se quedó atrás y que se manifestó pacíficamente. Era la palabra de la policía contra la de Isa Serra. El tribunal, como ocurre en estas ocasiones. optó en creer a la policía. Mi apoyo para Isa Serra.

A  Alberto Rodríguez le piden un año de prisión por supuestamente haberle propinado una patada a un policía. Alberto Rodríguez ha negado en el Supremo haber agredido a un policía. Según Alberto Rodríguez lo que se pretende es "la criminalización de la protesta social". los hechos remontan a 2014 durante una protesta contra la LOMCE del PP:

Rodríguez ha denunciado que el hecho de que este caso surja ahora "es parte de una estrategia (...) generalizada de criminalización de la protesta social". "También a lo mejor tiene algo que ver con que sea diputado de Unidas Podemos", ha deslizado. Infolibre...👈

Isa Serra ha recurrido la sentencia, por lo cual no es firme, y por eso hay que decir que todavía es inocente. Alberto Rodríguez tampoco ha sido condenado  porque todavía no hay sentencia culpabilizadora: ya van dos mentiras de El Español. 

Juan Carlos Monedero fue condenado por el el Tribunal Supremo debido a que no podía compaginar la docencia con la consultoría. Se saldó con un pena administrativa. La Complutense le privó de sus funciones durante seis meses por sus actividades de asesoría en países latinoamericanos.

Sobre la condena de José Luis Santos. Así lo explicaba La Razón: "El líder de Podemos en la Comunidad de Madrid, condenado a pagar 50.000 euros por despido improcedente". Luego al leer la noticia  el matiz era brutal:

La empresa que preside [José Luis Santos] echó a un trabajador con una incapacidad del 33% estando de baja. Un juzgado ha condenado ahora a Esmasa a indemnizarle.

Resulta que la condena ha sido contra Esmasa y no contra José Luis Santos. Muy mal por Esmasa en este caso, pero habría que analizar la culpabilidad imputable directamente a Santos. De todas formas  nadie ha condenado a José Luis Santos, otra mentira más.

La investigación a Irene montero, está siendo realizada por un juez sin competencias para esa labor, tal y como avanzó elDiario.es. Y parece responder más a una campaña de acoso y derribo que a un interés verdaderamente judicial. El caso Dina tiene pinta de convertirse en un culebrón. Como culebrones han sido todos los casos archivados. Sirvan como muestras dos titulares:

Cuartopoder. La justicia ha archivado 14 querellas contra Podemos y sus dirigentes

Desde su nacimiento, Podemos ha sido acusado de diferentes delitos mediante querellas judiciales sonadas. Principalmente sus vías de financiación han sido puesta en entredicho públicamente mediante algunas informaciones en medios de comunicación que se han traducido en varias denuncias ante la justicia. La pasada semana, tras el comunicado de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) denunciando amenazas y acoso del partido morado a un grupo de periodistas, sus dirigentes han invitado a la organización a acudir a los tribunales. Además han recordado que todas las denuncias presentadas oficialmente han sido archivadas.

 Infolibre. La macrocausa menguante contra Podemos: sólo una de las cinco líneas de investigación sigue abierta seis meses después.

La investigación que se abrió a Podemos hace seis meses por presuntas irregularidades en sus finanzas ha ido adelgazando hasta el punto de haberse archivado ya cuatro de las líneas indagatorias abiertas por el juez de Madrid responsable de las actuaciones. En diversos autos, el magistrado no ha visto indicios de delito en la contratación a la empresa ABD Europa LDA, en la caja de solidaridad de la formación ni en las obras de la nueva sede, y tampoco puede seguir adelante sobre el posible acceso al ordenador de una abogada del partido puesto que ni ella ni la formación lo han denunciado.

Tampoco se puede considerar que la imagen que ha ofrecido el diario de Pedro J. Ramírez, sea "el fin de Podemos". Hasta la fecha ningún cargo público de Podemos ha pisado el talego como en su día lo hicieron jerifaltes del PSOE o PP. Todavía tenemos al PSOE y PP disputándose los sillones de la Moncloa, por muchos investigados y condenados que han tenido a lo largo de toda su historia.

José Barrio Nuevo, Rafael Vera, Ricardo García Damborenea, Julen Elgorriaga y Julián San Cristobal (todos cargos políticos del PSOE), acabaron condenados y fueron a la cárcel por el terrorismo de los GAL. Felipe González, el jefe de todos ellos por lo visto no sabía nada del asunto. González aseguró por su honor que el Gobierno no estaba detrás de los GAL. El sinvuergüenza de Felipe nunca tuvo honor, y para colmo  tuvo la inmensa desvergüenza de ir a despedir a Vera y a Barrionuevo a la puerta de prisión.

Hay quien justifica esta imagen alegando que los GAL fueron una herencia del franquismo. Peor lo ponen, porque esto demuestra que la santa transición fue un ñordo monumental. Una mentira encubierta de democracia que debajo de la alfombra escondía toda la basura franquista.

Y en el PP la cosa no es mucho mejor, no ya por su defensa del franquismo, que también, sino porque importantes prebostes del partido también han dado con sus huesos en la cárcel: "Rodrigo Rato, Bárcenas, Jaume Matas, Carlos Fabra, Francisco Granados, Jesús Sepúlveda, Alberto López Viejo... Repasando las hemérotecas nos parece prodigioso que el PP (que quiere o quería vender su "corrupta" sede en Génova) haya arrasado en la comunidad de Madrid acercándose casi a la mayoría absoluta. Tal vez no haya nada de prodigioso en el resultado de Madrid, tal vez es que los españoles somos estúpidos.

Gerardo Tecé se preguntaba que si se puede criticar a los votantes. Dejaba una interesante reflexión: "Ser el único de la plaza de toros que piensa que lo que le hacen al animal es tortura no te quita razón, aunque a tu alrededor todos saquen un pañuelo. La democracia no va de aceptar que la mayoría tiene razón". La democracia es el mejor de los peores remedios. Esto es así porque las élites saben muy bien como controlarla para que todo siga en su sitio. Un ejemplo de lo que digo es el artículo que hoy estamos comentando de El Español de sugerente titular: "La foto del fin de Podemos: tres condenados, dos investigados y el caso Dina acechando a Iglesias". Un titular engañoso que no dice toda la verdad. Dos de esos condenados (que todavía está en el aire) lo han sido por su activismo social, por defender a los de abajo; uno por conflicto de incompetencias laborales que se saldaba con una pena administrativa; y otro, que no es tal sino la empresa que dirige,

Las elecciones de Madrid han demostrado que el pueblo vota, y lo hace hasta en plena pandemía en una comunidad con uno de los peores datos sanitarios de España. Esos cantos de sirena de los que dicen que no hay que votar porque absteniéndose cae el "sistema" es mentira. Y es mentira porque las pruebas son demoledoras y se viene demostrano desde la transición. Hay que salir a votar a la opción menos mala, no porque vayan a cambiar nada, sino porque no van a joder más lo que hay.