El Frente Popular, los golpistas y la Guerra Civil

 

Milicianas durante la Guerra Civil

Hoy me han asegurado que la Guerra Civil que se desató después del golpe de Estado de 1936 fue por culpa del Frente Popular. Se suele aludir la violencia política de las izquierdas en la primavera del 36 para justificar el golpe de Estado, y en otros casos a que la izquierda nos iban a convertir en un país de la órbita soviética. Ambas visiones son falsarias. 

Sobre la violencia política tenemos el libro Cifras Cruentas. Las víctimas mortales de la violencia sociopolítica en la Segunda República Española (1931-1936), de Eduardo González Calleja. En efecto, hubo muchos muertos, pero la mayoría de las víctimas eran de izquierdas producidas por las fuerzas del orden público, sobre todo de la Guardia Civil.

Stalin no estaba interesado en que la II República estuviera en sus manos. Las órdenes de Stalin consistían en colaborar con las izquierdas burguesas para parar el fascismo. En Francia, sin ir más lejos, hubo otro Frente Popular liderado por el socialista León Blum que gobernaron de 1936 a 1938. Los frentes populares fueron una idea de la Internacional Comunista en su VII Congreso celebrado en Moscú en agosto de 1935. Si Francia no se bolchevizó, no hay motivos de peso para afirmar que en España iba a ser distinto.

El Frente Popular fue la unión de toda la izquierda, desde las izquierdas burguesas republicanas, hasta los partidos marxistas y el Partido Sindicalista del exanarquista Ángel Pestaña: PSOE, IR, UR, ERC, PCE, ACR, USC, PG, PRFD, UdR, PNRE, PS, PSI, POUM, PCP, EV, y candidatos independientes. El problema para los apocalípticos que afirman que los golpistas se sublevaban contra el Frente Popular que habían sembrado el caos en España, es que el Frente Popular tan solo es una coalición que desaparece una vez acaban los comicios de 1936.

Si en 1931 el Gobierno estaba formado por una conjunción republicano/socialista, en donde participó hasta Alejandro Lerroux siendo ministro de Estado durante ocho meses, en 1936 después de las elecciones de febrero, todos los gobiernos que se formaron fueron de la izquierda burguesa republicana. No es hasta la Guerra Civil, cuando en el Gobierno entran socialistas, comunistas e incluso anarquistas (estos últimos contra natura). Por tanto no se alzaban contra el Frente Popular, coalición que dejó existir después de los comicios de 1936.

Sobre quién nos llevó a la Guerra Civil, en uno de sus últimos trabajos, ¿Quién quiso la Guerra Civil?, Ángel Viñas desmonta los tópicos neofranquistas. El golpe de Estado lo azuzaron los monárquicos de Renovación Española (José Calvo Sotelo y Antonio Goicoechea). Los monárquicos viajaron varias veces a ver a Mussolini para buscar financiación con el fin de preparar el golpe de Estado si las izquierdas volvían al poder.

El primer golpe de Estado lo protagoniza el general africanista José Sanjurjo en agosto de 1932. Fue un golpe apresurado y sin planificar lo suficientemente bien. No se le unieron más militares, excepto Sevilla y Madrid, y tuvo que salir por piernas a Portugal, pero antes de salir de España fue capturado. Sanjurjo "fue detenido en Ayamonte (Huelva) cuando trataba de pasar la frontera. Según Eduardo González Calleja, fue detenido en la barriada Isla Chica de Huelva por un piquete de la Guardia Civil.​ Junto a Sanjurjo iban su hijo, el general García de la Herrán y el teniente coronel Emilio Esteban Infantes" (Wikipedia).

El segundo golpe de Estado lo protagonizan las izquierdas marxistas y anarquistas (PSOE, PCE, CNT y FAI) en octubre de 1934. A través de una huelga revolucionaria pretendían derrocar al Gobierno de Lerroux y Gil-Robles, pero la revolución solo tiene efecto en Asturias, y tras dos semanas los legionarios abortan el intento revolucionario. Otro golpe de Estado chapuza, pero más sangriento e inútil que la Sanjurjada de 1932.

Tenemos que esperar hasta el verano de 1936 para ver otro golpe de Estado. Esta vez los monárquicos de José Calvo Sotelo habían aprendido la lección del verano de 1932. Habían creado la reaccionaria Unión Militar Española (UME) y a través de panfletos apocalípticos y falsarios, estaban adoctrinando al Ejército, ya de por si predispuesto a creerse todas las falacias antimarxistas.

A pesar de la financiación de Mussolini, los conspiradores no consiguen que todo el Ejército al completo se subleve, y el golpe triunfa en media España y en la otra media fracasa. Y por eso vamos a la Guerra Civil, que sin la ayuda de Hitler y Mussolini, Franco no hubiera podido ganar.

En Badajoz, por ejemplo, el golpe no triunfa, los militares de alta graduación muestran su respeto al Gobierno republicano y logran que la II República prevalezca en la capital pacense. No es hasta el 14 de agosto de 1936 cuando el tte. coronel Yagüe, con la Legión y Regulares Marroquíes (los moros de Franco), rinden la plaza provocando una gran masacre en el tiempo que permaneció Yagüe en la capital. Aunque la matanza después de que Yagüe abandonara Badajoz no cesó.

En medio de estos tres golpes de Estado hubo tres insurrecciones anarquistas, Enero de 1932, enero de 1933 y diciembre de 1934. Estas insurrecciones para lo único que sirvieron fue para que muriera gente y se llenaran las prisiones. Azaña en el 36 le temía más a los anarquistas que al Ejército reaccionario. El tiempo y las circunstancias acaecidas le hizieron ver que estaba equivocado.

La lección que podemos sacar con tantos golpes de Estado y levantamientos anarquistas durante la II República, es que mientras el Ejército, la Guardia civil, el Cuerpo de Cabineros y la Guardia de Asalto, se mantuvieran en sus cuarteles a las órdenes del Gobierno de turno, como hicieron en la Sanjurjada, durante la revolución de Asturias y en las tres insurrecciones anarquistas, la continuación de la legalidad y de la Constitución estaban garantizadas. Solo se logró quebrar dicha legalidad, cuando una parte del Ejército se subleva en 1936, y la otra parte no es capaz de parar a sus compañeros golpistas.

Hay una Guerra Civil porque los monárquicos del protomártir José Calvo Sotelo, se habían empeñado en reinstaurar la monarquía de Alfonso XIII con la ayuda endógena de los carlistas, falangistas y militares reaccionarios, y con la colaboración exógena de nazis (Hitler) y fascistas (Mussolini). No es el inexistente Frente Popular en julio de 1936 quienes provocan la Guerra Civil, sino los alfonsinos, carlistas, falangistas y los militares felones.

Con la muerte por accidente de Sanjurjo y el asesinato de José Calvo Sotelo se estropean los planes de los monárquicos alfonsinos, sobre todo cuando Franco toma el mando. La II República llegó por la inutilidad de Alfonso XIII, que tras ver como en las grandes urbes ganaban las elecciones municipales las candidaturas republicanas, el rey se tomó como un plebiscito las elecciones y decidió poner pies en polvorosa y se exilió primero en Francia y después en la Italia fascista.

En el ABC, el 17 de abril de1931, antes de salir huyendo de España, Alfonso XIII dejó una nota muy aclarativa:

Las elecciones celebradas el domingo me revelan claramente que no tengo hoy el amor de mi pueblo. Mi conciencia me dice que ese desvío no será definitivo, porque procuré siempre servir a España, puesto el único afán en el interés público hasta en las más críticas coyunturas. (...) Pero, resueltamente, quiero apartarme de cuanto sea lanzar a un compatriota contra otro en fratricida Guerra Civil.

O sea, Alfonso XIII se marcha al exilio por miedo a una guerra civil. Falso. Ángel Viñas, después de visitar los archivos italianos nos descubrió una carta que Alfonso XIII le envió a Mussolini. "La carta se encuentra en los Documenti Diplomatici Italiani (octava serie, vol. IV, doc. Nº 577, p. 648). Es conocida, pero supongo que no de muchos lectores. Decía así"...

... Le supongo enterado de la enorme importancia del movimiento español. Faltan elementos modernos de aviación y con objeto de adquirirlos van a Roma Juan La Cierva (inventor del autogiro) y Luis Bolín, personas de mi entera confianza. El Marqués de Viana portador de la presente le explicará todos los detalles y la ayuda que espero nos prestará.

Aprovecho esta ocasión para de nuevo felicitarle por sus nuevos éxitos que consolidan su labor formidable y gloriosa. Agradeciéndole lo que seguramente hará quedo su afmo. amigo y admirador que le abraza. Leer más...👈

En abril de 1931, Alfonso XIII decía que quería apartarse "de cuanto sea lanzar a un compatriota contra otro en fratricida Guerra Civil", y una vez en el exilio no dudaba en pedirle ayuda al inventor de la ideología fascista para lanzar a los compatriotas en una fratricida guerra civil. Alfonso León Fernando María Santiago Isidro Pascual Antón de Borbón y de Habsburgo-Lorena (Alfonso XIII), es uno de los responsables de la Guerra Civil española, junto a carlistas, monárquicos de su cuerda y militares fascistas y reaccionarios. El Frente Popular no tuvo nada que ver.