Unamuno reconocido por la Universidad de Salamanca a pesar de apoyar a los golpistas del 36

 

Miguel de Unamuno Adarraga en la ceremonia en honor a su abuelo en la Usal. Diario de Castilla y León...👈

Miguel de Unamuno ha sido nombrado honoris causa en la Universidad de Salamanca como desagravio al destierro que sufrió por enfrentarse al dictador Miguel Primo de Rivera (el padre un dictador y sus hijos unos fascistas). Familiares que han asistido al acto en nombre de Unamuno han dicho de él que "No le gustaba que le pusieran etiquetas. Como representante destacado de la generación del 98, era un librepensador, con independencia de los partidos políticos, algo que no lo distanció de la preocupación por el bien colectivo". Si, mucho libre pensador pero no dudó en ponerse del lado de los golpistas de 1936.

La II República nombró a Unamuno como rector vitalicio...

... En el otoño de 1934, Unamuno recibe un homenaje nacional en Salamanca con motivo de su jubilación a los 70 años, al que asiste el presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora. Es nombrado rector vitalicio de la Universidad, hijo predilecto de Bilbao y se le propone para la concesión del Premio Nobel de Literatura. Leer más...👈

De no haber estallado la Guerra Civil, y que Azaña primero le quita los honores a Unamuno, y que Franco después de restituírselos se los vuelve a quitar, Miguel de Unamuno hubiera muerto con todos los honores, y este reconocimiento de la Usal con el honoris causa sería totalmente innecesario. Unamuno acabó sus días detenido de facto y despojado de todos sus cargos. Uno de los nietos del filósofo dijo en la ceremonia del acto, que era un justo reconocimiento al "darle a Unamuno lo que es suyo desde hace un siglo, por decir siempre lo que pensaba, enfrentándose al poder, criticando y condenando su actitud represiva".

El reconocimiento a Unamuno obvia parte de la historia del intelectual al situar el homenaje durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera. Enfrentarse a una dictadura está bien y es justo y necesario. Pero apoyar un golpe de Estado siempre es antidemocrático, se mire por donde se mire. Todo lo que llego a leer sobre Unamuno justifica su actitud diciendo que lo que quería el filósofo español era que los militares pusieron orden a los desmanes del Frente Popular. Por esa regla de tres todos los intelectuales deberían de haber apoyado a los golpistas. Unamuno tenía la vista muy parcial: solo veía los desmanes de la izquierda y no se percataba que el Gobierno trataba de atajar la violencia política producida por la izquierda y la derecha, y que el Frente Popular no llegó nunca a gobernar. Solo hubo ministros de las izquierdas burguesas y republicanas.

Si Unamuno hubiera vivido durante la transición donde la ETA, el GRAPO y bandas de extrema derecha asesinaron a más de 500 personas durante la transición, no tengo dudas de que hubiera apoyado a Tejero para que pusiera fin a los desmanes.

Volvamos a la ceremonia del honoris causa a Unamuno: el actual rector, Ricardo Rivero, en la ceremonia dijo de Unamuno que "Hoy reconocemos en esta universidad al más coherente de sus profesores, a su más completo rector, al intelectual de más audacia de su tiempo, rasgos personales que le costarían el destierro y otros muchos pesares, pero que también le hicieron un héroe con mayúsculas y por eso le seguimos recordando". Sí, muy héroe y muy coherente, sobre todo para los golpistas de Salamanca. Unamuno a nivel nacional e internacional legitimó el golpe de Estado de 1936.

En El Español destacaban el incidente del Paraninfo de la Universidad de Salamanca:

Tal y como recogió Alejandro Amenábar en la película Mientras dure la guerra (2019), Unamuno protagonizó uno de los episodios más recordados de la historia reciente de España en la Universidad de Salamanca. El 12 de octubre de 1936, apenas unos meses después del alzamiento, se produjo en el Paraninfo de la institución un histórico enfrentamiento entre Millán Astray, líder de los legionarios, y Unamuno, nombrado rector vitalicio por decreto unos días atrás. Para la historia, la frase "Venceréis, pero no convenceréis".. Leer más...👈

De lo que siempre se olvidan es que apoyó a los golpistas durante el golpe de Estado y que de Franco tenía la siguiente opinión:

En cuanto al Caudillo -supongo que se refiere al pobre General Franco- no acaudilla nada de esto de la represión, del salvaje terror de retaguardia. Deja hacer. Esto, lo de la represión de retaguardia, corre a cargo de un monstruo de perversidad, ponzoñoso y rencoroso. El es el general Mola, el que sin necesidad alguna táctica, hizo bombardear nuestro pueblo. Ese vesánico no ha venido -al revés de Franco- sino a vengar supuestos agravios de tiempo de la dictadura primo-riverana, y a satisfacer los odios carlistas de los que en las anteriores guerras civiles se ensañaron con nuestro Bilbao.

(...) Y el pobre Franco, que ya una vez rechazó -si bien tímidamente aquello de Primo de Rivera de «los de nuestra profesión y casta refiriéndose a nuestra oficialidad de carrera, que no es el ejército, como el clero  no es la iglesia, el pobre Franco se ve arrastrado  en ese camino de perdición. Y así nunca llegará  la paz verdadera. Vencerán pero no convencerán; conquistarán pero no convertirán. Leer más...👈 

Unamuno también aseguró que "Hay que salvar la civilización occidental, la civilización cristiana tan seriamente amenazada". Opinaba sobre quitar los crucifijos de las escuelas, que "era un error arrancar los crucifijos de las aulas, no porque sea católico, sino para que no dejen de serlo los españoles" (ver enlace...👈). Están muy bien las ideas religiosas, pero en las Iglesias. ¿Libre pensador? ¿O libre "incordiador"? En el lenguaje del pueblo se llama tocapelotas, que es el que se opone a todo por sistema.

Manuel Azaña cesó a Miguel de Unamuno y Jugo, por haberse sumado a la facción en armas y por falta de lealtad a la II República. Lo cesaron como rector Vitalicio de la Universidad de Salamanca y titular de la cátedra Miguel de Unamuno. Azaña también le quitó su nombre al Instituto de Segunda Enseñanza de Bilbao. Y se le separó de todo cargo o comisión relacionado con el ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes.

Si la II República hubiese ganado la guerra, Miguel de Unamuno hubiera sido juzgado por auxilio a la rebelión. Al afamado intelectual, a pesar de su arrepentimiento, habría que aplicarle la Ley de la Memoria Democrática por haber apoyado a los insurrectos en un primer momento. El acto de rebeldía en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca no sirvió para nada porque no salió recogido en la prensa de la época: a ojos de los españoles y el resto del extranjero, Miguel de Unamuno apoyó el golpe de Estado de 1936. Algo que nadie puede negar. Tal vez el arrepentimiento de Unamuno le hubiera servido para que lo indultaran si la II República hubiese ganado la Guerra Civil, pero el deshonor por haber apoyado un golpe de Estado no se lo quita nadie.

La opinión de este don nadie, es que Unamuno pasará a la historia como un gran intelectual y como un enorme traidor al apoyar el golpe de Estado de 1936. Tenemos que saber separar la obra del autor de su condición humana.