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| No es Arturo González, pero ¿a que se le parece? |
Arturo González escribió en julio:
¿No estará Pablo Iglesias abusando de la televisión?
El programa La Sexta Noche de este último sábado batió su récord de audiencia (15,9 %) y fue el segundo programa más visto de todas las cadenas españolas, solo superado en 7 décimas por la incombustible Pretty Woman en su decimonoveno pase. Evidentemente se debió a la presencia de Pablo Iglesias y a su enfrentamiento con Esperanza Aguirre y Eduardo Inda.
¿Hace bien Pablo Iglesias en seguir acudiendo a estos debates o le puede dañar tanta reiteración? Iglesias no puede convertirse en el Belén Esteban de la política. Y ya no necesita la promoción televisiva. No debe quedar sumergido en un marhuenda o inda más. Diga lo que diga le van a seguir acusando de no afirmar que los etarras son asesinos —como si hiciera falta—, y de lo que cobra en el Parlamento europeo. En el mismo programa del sábado no hubo vencedores ni vencidos si de eso se trataba. Los de cada lado, y sus espectadores, ya estaban convencidos, y ya se sabe lo imposible que resulta convencer a alguien para que cambie de opinión. Tal vez sea la hora de que se recoja para preparar su ofensiva de otoño con la organización de su partido, la exposición clara y matizada de su programa, y la resolución de la dificilísima cuestión del asamblearismo, la toma de decisiones y sus modos de representación. El huevo ya está puesto, la semilla ha comenzado a germinar y no precisa más riego de este tipo.
Sería una lástima que Iglesias, por ego, morbo, exceso de identificarse con lo popular o interés comercial de las cadenas, echara a perder lo conseguido, que es muchísimo. De lo que se trata ahora es de si su programa es viable y los españoles lo aceptan. En la premura, ni siquiera desmintió la acusación de la viperina Aguirre del comunismo de Iglesias. ¿O lo es? Porque eso sí que espantaría a los españoles.
El valor principalísimo de Iglesias consiste en su integridad y honradez políticas, así como en representar la sed de cambio de millones de españoles. No debe caer en la trampa de las deformantes y manipuladas encerronas televisivas por más placenteras que nos resulten. Su examen de conducir político será en octubre. El teórico. Y luego, el práctico, en las elecciones de mayo próximo. E Iglesias dotes tiene para aprobar los dos y sacar el carné.
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| Este sí es don Arturo |
He subrayado doblemente y hasta por triplicado, lo más relevante del texto, porque da la sensación de que en Podemos han seguido el consejo de don Arturo y han decidido dosificar las apariciones televisivas de Pablo Iglesias y demás elenco podemista. Da la sensación de que cuando Iglesias le dio plantón a Telecinco había seguido al pie de la letra los consejos de don Arturo y decidió no
"caer en la trampa de las deformantes y manipuladas encerronas televisivas"
Claro que, esto lo escribió el bloguero de Público durante el summertime, posiblemente cerca de una piscinita o un chiringuito playero y degustando un refrescante y embriagador mojito. Porque sino no se entiende ese cambio tan radical cuando don Arturo le retiró su apoyo incondicional a Pablo Iglesias y a Podemos.
El 21 de noviembre dentro ya del melancólico otoño y después del plantón a Telecinco de Pablo Iglesias, un encolerizado don Arturo escribía:
Pablo Iglesias, ¡qué gran decepción!
Se le habrá subido ya el éxito a la cabeza. Le ha comunicado a Mediaset que incumplirá el compromiso adquirido y no acudirá este sábado al programa Un tiempo nuevo, de Telecinco. Ha ofrecido contestar a una sola pregunta de la presentadora desde la sede de su partido en conexión remota, es decir, en plasma, y sin otras preguntas de los periodistas del programa. Inaudito, descalificador. Eso no se puede hacer, por respeto al equipo que con seguridad lleva toda la semana preparando la entrevista. Y por respeto a la profesión periodística, él que tanto defiende que no deben existir televisiones privadas sin control, pero bien que ha ido y va a ellas, Intereconomía y Gato al agua incluidos. Con esta decisión, aparte del daño que hace a un programa que lucha por su continuidad, Iglesias pierde bastante o toda credibilidad. ¡A ver si va a tener razón el siniestro Inda, de la competencia! Su futuro ante los medios queda en entredicho, aun con la disculpa de que la decisión no es de él, sino de su equipo directivo, que, por cierto, no lo habrá consultado con las bases. Su no comparecencia le lleva a ser un político más, igual de informal, y pasa a ser casta genuina. Ni siquiera dan su versión oficial y un miembro del equipo, por muy eurodiputada que sea, se limita a decir que deben revisar sus comparecencias públicas. ¡Justo antes de ésta, que tenía comprometida! Si tiene algo que recriminar a la cadena, va y lo dice allí, sin necesidad de esta venganza infantil. Esto no es un asunto menor, esto es más gordo que lo de sus antecedentes políticos tan manidos y por lo que tanto le han atacado. Esto le descalifica como político serio. Nunca más será creíble. Había que ir y contestar a lo que Pepa Bueno y demás le preguntasen. Queda como miedoso y pusilánime. Ante el furor de Podemos, que hoy mismo cristaliza en que ya es la tercera fuerza en Catalunya y la primera en Navarra, según las encuestas fiables, muchos, muchísimos, no le darán importancia a su quebrantamiento de contrato verbal. Pero algunos ya no le creeremos ni le votaremos, porque para algunos la palabra dada está antes que el programa. ¿Por qué vamos a creer en el cumplimiento de su programa, que, parece, van a anunciar inminentemente?
Don Arturo, usted como asesor de un partido político no tendría precio. Lo hundía en dos días. Pedro Arriola es un genio al lado de usted. Nos asombra esa preocupación de don Arturo por
"un programa que lucha por su continuidad". ¿Qué pasa que en ese programa no existen las "
deformantes y manipuladas encerronas televisivas"? Y sobre la continuidad del programa al que se refiere don Arturo, nadie debiera preocuparse, ya que en ausencia de Pablo Iglesias taparon el hueco con el mentiroso compulsivo que es el "pequeño" Nicolás consiguiendo un récord de audiencia. ¿Qué se ha pensado usted? En Telecinco, precisamente ahí, no se han caído de un guindo antes de ayer.
No comprendemos esa pataleta de Don Arturo, porque era obvio que Pablo Iglesias tarde o temprano aparecería en la pantalla "chica". ¡Y de qué forma y en donde volvió a aparecer! En la televisión del Partido Popular (RTVE) donde le tenían preparada una "
deformante y manipulada encerrona televisiva". Pero allí reapareció Pablo Iglesias, en un terreno hostil bajo el fuego enemigo tanto de la izquierda como de la derecha (PSOE y PP).
Sí Iglesias estaba todo el santo día pululando por las televisiones; alguien se preguntaba que si "¿No estará Pablo Iglesias abusando de la televisión?". Cuando decide plantar un programa para meditar una estrategia y esperar a que dos economistas de prestigio le hagan un borrador del programa económico; alguien exclama: "Pablo Iglesias, ¡qué gran decepción!". Al final entre los hunos y los hotros nos volverán locos.
Las elecciones se ganan gracias a los votos, sin votos no hay escaños y según el devenir de los acontecimientos las estratagemas electorales deben estar orientadas hacia un lado u otro. Sea un partido nuevo como Podemos o un partido centenario como el PSOE. A ver si Podemos por ser un partido joven que critica a la "casta" no va a poder tener una estrategia electoral. Decía mi amigo Antonio Alfonso que Podemos usa
"pura estrategia electoral. Igualito que hacen los partidos a quienes tanto critican". Pero precisamente Podemos no critica a la "casta" porque cada partido necesite esta u otra estrategia electoral. A los partidos de la "casta" se les critica por la deriva que han llevado cuando han gobernado. Ya tendremos tiempo de criticar a Podemos si gobiernan alguna vez.
Sí observamos serenamente, tanto el PSOE como IU están poniéndose las pilas y han dejado paso libre a caras más jóvenes para luchar contra Podemos. IU está entonando el mea culpa.
Alberto Garzón: "Si IU hubiera hecho sus deberes, Podemos hoy no existiría". Pedro Sánchez también se ha puesto el mono de trabajo y está reorientando el PSOE hacia la izquierda, pero sin abandonar su guiño liberal: quiere reformar la Constitución, aunque sigue pensando que los españoles debemos de jubilarnos a los 67. Sí todo sigue igual nuestro jóvenes de hoy van a tener que jubilarse a los 80 años si lo quieren hacer con la cotización suficiente.
El caso es que tanto la derecha mediática como la
izquierda de pandereta está todo el día lanzando munición por la Red contra Podemos. Munición que es aprovechada por cualquiera y compartida por las redes sociales como si de una verdad incontestable se tratase. Porque una cosa es la crítica sana. Crítica necesaria y a la que todo el mundo debe estar expuesto, y otra cosa son las interminables payasadas que se escriben para desgastar a Podemos.
Querido Alberto Garzón, ¡qué razón tienes! No hicisteis los deberes a tiempo y ahora un neonato os saca los colores. El PSOE, no es que no hiciera los deberes, es que ni siquiera se dignó asistir a clase. Da igual lo que diga Pablo Iglesias, da igual que sea el único partido que acepta un debate sobre su programa económico, es más, da igual como sea su programa económico, las descalificaciones llueven por todos lados. Joder, no importa que se quiera defender a los que más sufren la crisis.Total, eso es populismo, y como es populismo, a Podemos solo le interesan los votos no las personas que les regalan esos votos. Realmente para saber si Podemos, o sea Pablo Iglesias, está interesado más en los votos que en las personas, habría que esperar a que Podemos fuera el partido del Gobierno. Algunos iluminados no esperan para dar su veredicto: Podemos solo busca poder, escaños, diputados; son comunistas, bolcheviques, populistas, bolivarianos. Lo primero son los votos; Hugo Chavez, casta universitaria; cobran de Irán y se alegran porque la ETA esté en la calle.
Para terminar os dejo con dos tuits de un economista -Jesús Arroyo-:
Cuidado con populistas: - Subirán impuestos -Justicia no independiente -Habrá consulta Cataluña -Santi Potros irá a calle No como con Rajoy
Lamentable que Zapatero siga liberando etarras cuando Rajoy está ya en el Gobierno.
Siento decirlo, pero el término casta se quedó muy corto para definir a ciertos políticos.
