Una mujer pasea delante de la exposición con las banderas republicana en Valladolid, de la época franquista, la Transición y la oficial desde 1981. RAMÓN GÓMEZ |
Con la proclamación de la II República el 14 de abril de 1931, los ayuntamientos se llenaron de banderas tricolores, que al poco tiempo se hicieron oficiales en la Constitución republicana.
La bandera con los colores rojo, amarillo y morado alcanzó rango constitucional al figurar expresamente en el artículo 1º de la Constitución de la Segunda República española, aprobada por las Cortes Constituyentes el 9 de diciembre de 1931. Leer más...👈
No fue hasta el 15 de agosto de 1936 (un mes después del comienzo del golpe de Estado) cuando Franco hizo oficial la antigua bandera de la España monárquica (la bandera fue un invento de Carlos III):
Antes de publicarse el Decreto y con autorización de la Junta de Defensa el 15 de agosto se realizó el cambio de bandera en el Ayuntamiento de Sevilla. El general Franco cedió al general Queipo de Llano la retirada de la tricolor y él izó la bicolor. Leer más...👈Pero no se hizo oficial hasta 15 días después: "El 30 de agosto la Junta de Defensa Nacional que presidía el bando rebelde publicó el decreto que instauraba la 'bicolor' de antes de la II República" (El Mundo...👈).Desde mediados de agosto, el bando golpista y el Gobierno republicano estuvieron luchando bajo distintas banderas. Unos la tricolor, el Gobierno legítimo de la II República, y otro la bicolor, el bando faccioso y golpista de Franco. Al acabar la Guerra Civil en 1939, la bandera roja y amarilla se impuso por fuerza y sangre en todo el territorio español.
Los justo durante la transición hubiera sido volver al régimen republicano, pero es obvio que el monarca Juan Carlos I y Adolfo Suárez no estaban por la labor. El rey y Suárez no se iban a tirar piedras sobre su propio tejado. No olvidemos que Juan Carlos I fue rey por el nombramiento de un dictador, que puso como condición para que el apellido Borbón siguiera reinando en España, que hubiera un salto de dinastía: a quien le tocaba reinar era a su padre Juan de Borbón, pero a Franco no le salió de su "real" gana. Por eso Juan de Borbón se vio obligado a abdicar en la figura de su primogénito Juan Carlos I, por el capricho de un sátrapa sangriento llamado Francisco Franco.
Hasta ahí llegó la ilegitimidad de la transición, que por otra parte no se podía hacer de otra forma, porque la transición quienes en realidad la hicieron, fueron los franquistas (con la vigilancia del Ejército) que tuvieron que abrir las puertas a la izquierda, no sé si por convicción, pero seguro que para dotarse de cierta legitimidad de cara al resto del mundo.
Adolfo Suárez no quiso hacer un referendo entre monarquía o república, porque como le reconoció a Vitoria Prego, las encuestas daban como perdedora a la monarquía (ver enlace...👈). Así que ni corto ni perezoso, Suárez metió al rey en la Ley para la reforma Política primero, y después en el texto constitucional. Si los españoles querían Constitución tenían que tragar con el Borbón. Y París bien bien merece una misa.
Se dice que la derecha se ha apropiado de la bandera española: no, no se la ha apropiado, es y era un símbolo que les pertenecía (durante toda la Guerra Civil) y le sigue perteneciendo ahora. Para colmo en cualquier manifestación masiva, para protestar por el aborto, por el matrimonio homosexual, o contra los gobiernos de izquierdas, no dudan en ondearla no sin cierta agresividad.