eldiario.es nos ha confirmado que algunos obispos españoles estarían de acuerdo con un pacto entre PP y PSOE, esta ocurrencia ya partió en su día del capitalista Felipe González. Que pacten, que pacten, que se van a hundir definitivamente. Con Podemos no van a pactar porque algunos sociatas se creen que ese pacto le iba a hacer daño al PSOE. En realidad a quien le iba a hacer más daño es a Podemos. Por eso Podemos jamás debiera de pactar con los sociatas.
Y es que a pesar de la diferencia de escaños entre PSOE (90) y Podemos (69), 21 en total; la diferencia en votos no es tanta: Pedro Sánchez 5.521.328 y Pablo Iglesias 5.180.007 (una diferencia a Favor del PSOE de 341.321 votos) es decir, el PSOE ha obtenido el 22,02% de los votos y Podemos el 20,65%. La diferencia es mínima, un 1,37% de los votos. ¿No está mal para el coletas podemita? Si eliminásemos la siniestra Ley D'hont y se aplicase una ley de circunscripción única, el PSOE habría conseguido 79 escaños y Podemos 73.
Por esta razón veo algo nerviosos a mis amigos sociatas del FaceBook, entre ellos hay profesores y algún que otro historiador. Un profesor ha compartido esta fotografía diciendo: "que se vaya, que se vaya, que se vaya..."
Nos han querido engañar con las encuestas aduciendo que Podemos se había hundido y que era la última fuerza muy por debajo de Ciudadanos. La realidad es bien distinta, tercera fuerza política y pisándole los talones al PSOE.
Que se vaya, que se vaya el "coletas" que nos desmonta el chiringuito sociata.
Soy partidario de la circuncripción única. O sea, para decirlo menos cursi, menos técnico: Soy partidario de que el conteo de votos de las Elecciones Generales se haga de ámbito nacional (o de toda España, pa entendernos). Y una vez contados todos los votos, aplicar LA REGLA DE TRES SIMPLE que dice:
ResponderEliminarel total de votos válidos obtenidos por todas las candidaturas es a 350 señorías, como los votos obtenidos por la candidatura Alfa es igual a equis
Luego, en esa regla de tres se van poniendo las diferentes candidaturas..., Beta, Gamma, Delta, Épsilon..., y los diferentes resultados que se obtuvieran de (x) equis serían, sin decimales (con los correspondientes redondeos a la unidad) las señorías que le corresponderían a cada candidatura.
Luego después se aplicaría el mismo tipo de fórmula matemática para la asignación de escaños a los candidatos electos que se presentaban por cada región, autonomía, nacionalidad..., —o llámalo como quieras, ¿vale?—
En esto que salió un "listo" y va y me dice:
«Eso no es justo, porque de esa forma no saldría ningún diputado por la provincia de Soria».
Y voy y le digo yo: Sí, sí; ¡qué disgusto!. Soria se moriría de envidia al ver que Ávila, Burgos, Palencia, Segovia y Valladolid sí que tenían paisanos en el parlamento.
Y digo yo para mis adentros: «Peroooo, ¿a qué jugamos, a las regiones autónomas o a las provincias?»
(Eso último se quedó sin respuesta)